Un estudio español descubre el síntoma más común del covid desde la primera ola
No son ni la tos ni la fiebre.
Después de un largo año de investigaciones científicas y médicas, el coronavirus sigue dando sorpresas en forma de síntomas para una detección temprana. Ahora, los objetivos no son ni la fiebre ni la tos.
La última línea de detección del virus tiene que ver con los primeros efectos de la infección en el cuerpo humano y ha sido descubierta por miembros del Hospital 12 de Octubre de Madrid. En el trabajo también han participado técnicos del Hospital Clínico de Salamanca y ha sido publicado en The American Journal of Surgical Pathology. Sus efectos se retrotraen al pico de la primera ola de la pandemia, entre marzo y abril.
En su trabajo, los investigadores han reconocido partículas del virus en la piel a través de técnicas de microscopía electrónica. En concreto, han analizado cinco tipos de afecciones diferentes, que catalogan como “susceptibles de ser las primeras asociadas al covid”.
Las manifestaciones visibles en la piel, algo ya analizado en la segunda ola, pero no hasta ahora en la primera son, por orden de importancia en el estudio, lesiones acroisquémicas o sabañones, exantemas o sarpullidos, procesos de púrpura palpable, una erupción tipo urticaria y dos inespecíficas”, explica el hospital.
La mayoría de las lesiones se han localizado en pies, extremidades inferiores y tronco. Solo en casos aislados se han visualizado efectos negativos en las manos. De su localización hacen hincapié los investigadores, para favorecer su diagnóstico precoz en caso de aparición repentina en nuevos pacientes.
Buenas noticias pese a todo
Lo positivo dentro del malestar que ocasionan es que estas afecciones se han resuelto sin tratamiento entre cuatro y diez semanas después de su aparición. Del estudio se desprende, igualmente, que no existe una correlación directa entre las lesiones cutáneas y la gravedad del cuadro respiratorio derivado de la infección por covid-19.
Los datos del informe se basan en 25 muestras de pacientes de entre 7 a 13 años y 28 a 83 años presentadas por ambos centros “y recogidas entre el 20 de marzo y el 25 de abril” durante la primera ola, según el 12 de Octubre.
También se ha demostrado que la existencia del virus en las células endoteliales “favorece la activación de los mecanismos que desencadenan la inflamación” que origina las lesiones dermatológicas, lo que explicaría esta lesión cutánea vista desde el primer pico de la pandemia.