Trump firma una orden ejecutiva para "aliviar" a los ciudadanos del Obamacare
Busca formas de que se salten algunas de sus normas.
El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, ha firmado este jueves una orden ejecutiva que ha presentado como necesaria para "aliviar" a los ciudadanos ante algunos requisitos de Obamacare, la reforma de salud promulgada en 2010 por su predecesor, Barack Obama.
Según la Casa Blanca, el objetivo de la orden es "expandir las alternativas" a los planes de salud que ofrece Obamacare e "incrementar la competencia" para que los costes para los consumidores bajen.
Concretamente, la orden insta a las agencias federales a comenzar a investigar formas en que los pequeños negocios, y quizá los ciudadanos a título individual, puedan comprar pólizas de seguros.
Además, concedería a estos últimos la posibilidad de adquirirlas a corto plazo de aseguradoras que no tendrían por qué respetar en sus precios a interesados que padezcan de los llamados "problemas preexistentes", entre los que se encuentran por ejemplo secuelas de violaciones, artritis o asma.
El Gobierno de Trump busca así, por ejemplo, que los ciudadanos puedan comprar seguros médicos fuera de sus estados de residencia, algo que no está permitido bajo Obamacare.
UN "DESASTRE" Y UNA "PESADILLA" PARA LOS CIUDADANOS
En un acto en la Casa Blanca, el magnate ha denunciado el "desastre" y la "pesadilla" que a su juicio ha supuesto el Obamacare para los estadounidenses.
En su discurso, ha anticipado que la orden "es solo el principio" y ha prometido seguir tomando medidas para dar "más alivio y más libertad" a los ciudadanos a la hora de elegir sus planes de salud.
Trump ha recurrido al mecanismo denominado "decisión ejecutiva", potestad exclusiva del presidente para pasar por encima del Congreso, donde los esfuerzos de su Administración para derogar la ley han fracasado por la oposición de algunos legisladores republicanos.
LOS REPUBLICANOS, MUY DIVIDIDOS
Pese a que la derogación del Obamacare fue una de sus promesas de campaña, hasta ahora Trump no ha sido capaz de aprobar una nueva ley de salud, aunque su partido controla ambas cámaras.
El decreto firmado este jueves por Trump es el paso más significativo dado hasta ahora por el mandatario republicano para empezar a desmantelar la reforma de salud de los demócratas, que ha permitido a millones de estadounidenses acceder a cobertura médica.
Tras varios fracasos por la fuerte división interna entre los republicanos, Trump ha dicho que quiere negociar con la oposición demócrata y tratar de acordar un proyecto bipartidista.