Transgresión, espectáculo y mucho Almodóvar: la mirada cinéfila de Jean Paul Gaultier en Madrid
El diseñador presenta la exposición 'Cine y moda. Por Jean Paul Gaultier' en el CaixaForum.
En Kika, de Pedro Almodóvar, Victoria Abril interpreta a Andrea Caracortada, una reportera que presenta sin escrúpulos un programa de sucesos ataviada con locos estilismos y, en algunas escenas, con una cámara en la cabeza y un mono de motorista salpicado de excesivas protecciones. Lo firmaba Jean Paul Gaultier, que esta mañana ha revelado en Madrid lo que pasó la primera vez que Abril se probó el traje en París, todavía sustentado por alfileres.
“Se mira, y ya metida en el personaje, se pone a recitar el papel. Entra en la película”, ha revelado el modisto francés. Ese es el poder del vestuario en el cine y es uno de los aspectos sobre los que reflexiona la exposición Cine y moda. Por Jean Paul Gaultier que se podrá ver en el Caixaforum de Madrid hasta el 5 de junio.
Gaultier es el director artístico de la muestra, en la que también ejercen como comisarios Florence Tissot y Matthieu Orléan. Se trata de una nueva colaboración entre la Fundación La Caixa y la Cinémathèque française, que se pudo ver en París hace unos meses y que para su llegada a Madrid trae novedades que muestran fragmentos de cintas y piezas de vestuario imprescindibles de la historia del cine español.
En paralelo a la muestra, se ha organizado un ciclo de conferencias para hablar de moda, cine y su relación con otras artes, y otro de cine, comisionado por Rossy de Palma, una de las más estrechas colaboradoras del diseñador francés.
La exposición parte de Falbalas (1945), una cinta de Jacques Becker enmarcada en un taller de costura en plena posguerra que marcó la vida de Gaultier. “Es un melodrama, pero también un espectáculo suntuoso. Cuando vi la película dije: ’Quiero hacer este oficio”, reveló el modisto ante los medios. “No solo hacer desfiles, hacer moda. En esta película vi el elemento de espectáculo que tanto me gusta”, añadió Gaultier, confesando que llora de principio a fin de la cinta y que siempre ha buscado conseguir esa emoción con su trabajo.
Cine y moda también reflexiona sobre el cine como vehículo para plasmar los arquetipos de feminidad y masculinidad a lo largo de la historia y cómo han ido cambiando. “La moda es un ejemplo de la sociedad, de su evolución, de la vida”, resalta el modisto, que insiste en que “los tiempos cambian” y el cine está ahí para contarlo.
El diseñador pone de ejemplo el paso de las mujeres de ser objetos o femmes fatales a personas con poder, y cómo esa objetificación se ha ido trasladando a los hombres. En la exposición se exhibe el vestuario de uno de los primeros ejemplos: el personaje de Marlon Brando en Un tranvía llamado deseo. En la muestra también hay diseños lucidos por Audrey Hepburn, Catherine Deneuve, Grace Jones o Brigitte Bardot.
Transgresión
A lo largo de su carrera Gaultier ha trabajado y representado a colectivos minoritarios y ha desafiado los cánones de belleza del momento. Con The Rocky Horror Picture Show o Pink Flamingos, la muestra también explora la representación en el cine, centrándose en estrellas como Marlene Dietrich.
“Ella también jugó a ser una femme fatale, pero emancipada, poderosa, jugaba con la dualidad en los años 30”, resalta el diseñador, que se centra en el vestuario de la actriz. Era habitual que Dietrich vistiera con trajes de americana y pantalón en un momento en el que estaba mal visto. Destaca Gaultier que por un lado marcaba la cintura en un gesto de feminidad, y por otro apostaba por grandes hombreras para demostrar su poder y lucía pantalones de sastre completamente rectos.
Almodóvar y el cine español
La relación entre Jean Paul Gaultier y Pedro Almodóvar es una de las más icónicas de la historia del cine europeo y podrá estudiarse estos meses en el CaixaForum. “Ya era fan de su trabajo antes de trabajar con él”, reconoce el modisto, que solo tiene buenas palabras para el director. De sus películas alaba la representación del cambio en España, la libertad y a las mujeres fuertes, con carácter, a las que muestra en sus cintas. Rossy de Palma, Marisa Paredes, Victoria Abril, enumera.
Gaultier cuenta que fue el cineasta manchego quien le pidió que diseñara el vestuario de Kika; después llegarían La mala educación y La piel que habito. Su favorita, sin embargo, es una en la que no ha participado: Hable con ella. En su trabajo con el manchego gozó de libertad para crear y pudo comprobar de primera mano cómo el cineasta trata a sus películas “como sus bebés”. El director está presente en todas las decisiones del proceso porque tiene “su propio universo, extraordinario”.
En la muestra se incluyen varias piezas de vestuario de las creaciones de Gaultier para Almodóvar, además de imágenes de las películas, promocionales, carteles y hasta una editorial de Harper’s Bazaar dirigida por el modisto e inspirada en Entre tinieblas.
A pesar de que Almodóvar ocupa un lugar privilegiado en la muestra, no es el único icono en la exposición. Una de las primeras piezas de vestuario que se encuentra el visitante al llegar es el vestido que luce Penélope Cruz en La niña de tus ojos, y hasta un guiño a Don Quijote de Lost in La mancha, acompañado de una armadura creada por Demna Gvasalia para Balenciaga.
El modisto vasco, igual que Sybilla o Paco Rabanne, también están presentes. Gaultier ha contado ante los medios que la primera imagen que tiene de la cultura española es la de Luis Mariano cantando operetas en el Teatro de Châtelet (París), al que iba con su abuela. El diseñador también ha mencionado a Carmen Sevilla, Sara Montiel y a Antonio Banderas, en La máscara del zorro, como una versión patria de los superhéroes. Generosas han sido también sus palabras hacia Javier Bardem, al que considera “el Marlon Brando español”. Una comparación cimentada gracias a películas como Jamón, Jamón y Huevos de oro.
La exposición termina con una fiesta, la de los desfiles de moda. En una última sala se intercalan piezas de vestuario de varias películas entre los que se incluye un vestido de cocktail que llevó Grace Kelly en La ventana indiscreta.
“Los desfiles son la vida”, ha defendido Gaultier durante la presentación. Junto con esas piezas, las pantallas múltiples muestran escenas de diferentes películas en las que se han representado estos momentos cumbre de creatividad y espectáculo. De fondo, mientras Linda Evangelista se contonea en la pasarela en la pantalla, suenan el mítico Vogue de Madonna o George Michael.