Tortelini rellenos de tomates secos sobre crema de calabaza
Una receta sana para hacer las delicias de los amantes de la pasta.
Para la masa
Precalentar el horno a 160°C. Esparcir los trozos de calabaza en una bandeja de hornear forrada con pergamino. Hornea durante 1 hora, o hasta que estén muy tiernas.
Mientras se asa la calabaza, haz la masa de la pasta. Sobre una superficie de trabajo, haz un pozo con la harina y rompe los huevos en su interior. Bate los huevos con el tenedor, incorporando un poco de harina en el momento, hasta que veas que los grumos de masa se unen
Continúa con tus manos, amasando la masa hasta que tengas una bola suave y elástica. Aplástala en un disco, envuélvela en film transparente y déjala reposar durante media hora.
Cuando la calabaza esté tierna, sácala del horno y desecha el agua que haya podido liberar, luego haga puré la carne de calabaza hasta que esté suave en una licuadora.
Para el relleno
Añade el amaretti desmenuzado, la mostarda y el Grana rallado al puré de calabaza, removiendo para combinar. Sazonar con sal, pimienta y un poco de nuez moscada rallada. Cubrir con film transparente y reservar
Divide la masa de la pasta en tres trozos y enróllalos con una máquina de pasta. Normalmente me paro en el penúltimo lugar. Usando un cortador de ravioles redondo de 7-8 cm, corta tantos círculos de pasta como puedas conseguir
Coloca una cucharadita del relleno en el centro de cada círculo, luego dobla suavemente para formar una media luna. Presiona los bordes juntos, luego junta las esquinas para formar un tortelini. Alternativamente, puedes hacer estos cuadrados usando un cortador diferente o una rueda de pasta
Para terminar
Pon a hervir una gran olla de agua salada. Mientras tanto, en una sartén a fuego medio, derretir la mantequilla para la salsa. Añade las hojas de salvia y fríelas durante unos minutos, hasta que estén crujientes.
Cocina los torteli en agua hirviendo hasta que floten en la parte superior. Escurrirlos con una cuchara ranurada y transferirlos a la sartén con la mantequilla y la salvia. Saltear la pasta durante 30 segundos, hasta que esté uniformemente aderezada
Servir de inmediato con un espolvoreado de Grana Padano rallado y galletas amaretti desmenuzadas.