Tarjetas virtuales: la nueva forma de pago segura en un mundo que se aleja del dinero efectivo
Ya no es extraño ver pagar un simple café con ellas.
El Covid ha disparado el uso de tarjetas y ha reducido aún más el uso de efectivo. Las compras online se han incrementado considerablemente y el miedo al contacto ha hecho que usemos las tarjetas para casi todo. Ya no es extraño ver pagar un simple café con ellas.
Así, en 2020, según una reciente encuesta, el efectivo era el método de pago preferido solo para el 22% de los consumidores, mientras que el pago con tarjeta era el que más utilizaban un 60% y el móvil se situaba como la tercera opción de pago con un 12%.
El pago con tarjeta es más limpio (evitamos contacto con terminales), seguro y cómodo. Además, si se gestiona bien, puede servir para dejar constancia de todas las compras que se realizan y facilitar mucho la labor de contabilidad en las empresas.
¿Qué son las tarjetas virtuales?
La tarjeta virtual es una tarjeta de débito que no tiene un formato físico. Tienen numeración, fecha de caducidad y código de verificación igual que una física, pero no tenemos el plástico. Nos permite hacer compras online de forma segura y no tenemos miedo a perder la tarjeta.
Normalmente, las tarjetas virtuales son recargables o te ofrecen la posibilidad de establecer un límite de pago y cambiarlo cuando lo necesites. Así, evitamos el riesgo de perder mucho dinero o ponemos límite a los usuarios.
En el mundo de las tarjetas virtuales, tenemos que destacar las de Qonto, el neobanco que ha venido a revolucionar la gestión de las finanzas de las empresas. Las tarjetas virtuales de Qonto funcionan igual que una Mastercard física, pero con la ventaja de que podemos tener varias y dar una a cada equipo de trabajo o empleado para que pueda llevar la gestión de sus propios gastos. Se gestionan fácilmente desde la aplicación o la web, y el administrador puede decidir rápidamente a quién le da una tarjeta y con qué límite de gasto. Así, este podrá pagar tanto compras online de bienes o servicios, como los pagos que tenga que hacer en comercios físicos.
Con la aplicación de Qonto, se realiza una gestión inteligente de los pagos, ya que estos se pueden asociar fácilmente al ticket o factura que le corresponde (se saca una foto con el móvil o se adjuntan al movimiento de pago). Con esto se evitan las engorrosas hojas de justificación de gastos y la pérdida de facturas. Se simplifica mucho tanto la rendición de cuentas por parte de los equipos como la contabilización e imputación de gastos a cada proyecto.
Tarjetas virtuales y pago con móvil (Google Pay y Apple Pay): un tándem imbatible
La gran desventaja que tenían las tarjetas virtuales era que no se podían utilizar en el comercio físico. Al no tener un soporte de plástico, no se podía pagar con ellas en terminales. Sin embargo, gracias a la aparición de los métodos de pago alternativos Google Pay y Apple Pay, se pueden asociar las tarjetas virtuales de Qonto a ellos y pagar fácilmente con el móvil en cualquier parte. Se pueden añadir a estas aplicaciones de pago móvil tantas tarjetas como sean necesarias. Además, con Qonto se puede disponer del máximo disponible en la tarjeta, no existe el límite clásico de 20 o 50 euros para pago sin contacto.
Ventajas de contar con una cuenta online para el negocio
La ventaja principal de tener una cuenta online como la de Qonto para tu negocio es que puedes hacer todos los trámites de cobros y pagos necesarios pero sin comisiones ni gastos ocultos. Los gastos son fijos y reducidos. Podemos disponer de todas las tarjetas virtuales o físicas que necesitemos, lo que facilita el control de la gestión por equipos o departamentos.
Además, para la gestión de tesorería, Qonto ha creado Connect, una herramienta que te permite conectar tu cuenta con aplicaciones muy intuitivas que facilitan la integración con programas de contabilidad y facturación. Se ahorra tiempo y la información es más fluida.
Con Qonto dispones de un IBAN español, por lo que podrás hacer pagos por transferencia de forma sencilla, tanto en zona euro como a nivel internacional gracias a las transferencias SEPA y SWIFT. Además, también permite llevar una gestión inteligente de todas las tarjetas de débito de la empresa, bien sean físicas o virtuales a través de su app web o móvil. De esta manera, se facilita la contabilidad y el control presupuestario, así como se gana en autonomía para los equipos o departamentos de la empresa.