El Supremo revoca el tercer grado a los nueve presos de la causa del procés
Carme Forcadell y Dolors Bassa han vuelto a la prisión este mismo viernes.
El Tribunal Supremo ha acordado este viernes revocar el tercer grado penitenciario concedido por el departamento de Justicia de la Generalitat catalana a los nueve condenados a penas de prisión en la causa del procés, al considerar que se trata de una medida prematura. Por lo tanto, no podrán salir de la cárcel para trabajar o realizar voluntariado.
Una medida de efecto inmediato ha sido la vuelta a prisión de la expresidenta del Parlament Carme Forcadell y la exconsellera Dolors Bassa para cumplir sus condenas en segundo grado. Forcadell, en la penitenciaría barcelonesa de Wad-Ras y la antigua consejera, en el Puig de les Bases en Figueres (Girona) arropada por manifestantes independentistas e integrantes del actual Govern,
La Sala destaca que es preciso que transcurra un periodo de tiempo mayor para evaluar adecuadamente la evolución del interno y el tratamiento penitenciario, máxime cuando se trata de condenas elevadas (de 9 a 13 años de cárcel) de las que ninguno ha cumplido la mitad, y la mayoría ni siquiera una cuarta parte.
El tribunal que ha dictado los autos está formado por Manuel Marchena (presidente y ponente), Andrés Martínez Arrieta, Juan Ramón Berdugo, Antonio del Moral, Andrés Palomo y Ana Ferrer.
En los nueve autos, de contenido similar, los magistrados explican que la concesión del tercer grado a un interno que no haya cumplido la cuarta parte de la condena (que es el caso de todos ellos salvo Jordi Cuixart, Jordi Sánchez y Joaquim Forn, que tampoco han cumplido la mitad) es excepcional y exige “una justificación reforzada, lógicamente, con respecto a aquella exigible en los supuestos en los que se propone para el tercer grado a un interno que ya ha cumplido la cuarta parte de la condena”.
El Supremo recalca que “ninguno de los acusados en este procedimiento ha sido condenado por perseguir la independencia de Cataluña. Las ideas de reforma, incluso ruptura, del sistema constitucional no son, desde luego, delictivas. Su legitimidad es incuestionable, está fuera de cualquier duda. El pacto de convivencia proclamado por el poder constituyente no persigue al discrepante. Ampara y protege su ideología, aunque ésta atente a los pilares del sistema”.
Por ello, el tribunal destaca que “yerra la juzgadora de instancia al dejar entrever que la estimación del recurso del Ministerio Fiscal implicaría exigir al interno que modificara su ideología. El Sr. Junqueras –indica en el auto referido al exvicepresidente de la Generalitat— no fue condenado por su ideología independentista. Fue declarado autor de un delito de sedición en concurso con un delito de malversación de caudales públicos en su modalidad agravada, con base en los hechos declarados probados en el juicio histórico de nuestra sentencia”.
Además, destaca que “nadie cumple condena en un centro penitenciario por sus ideas políticas”: “Buena prueba de ello es que el gobierno autonómico de Cataluña, en la actualidad, está presidido por un dirigente del mismo partido político -y, por tanto, de la misma ideología- que el interno recurrente”.
En otro pasaje de los autos, el tribunal señala que “no se pretende que el interno ‘reniegue de sus convicciones políticas’, sencillamente porque éstas son ajenas a su condena. Sostener que el cumplimiento de las penas impuestas en la sentencia que está siendo objeto de ejecución exige como presupuesto que el interno ‘reniegue de sus convicciones políticas’, supone aferrarse a una línea argumental equivocada, que nada tiene que ver con el significado del cumplimiento de una pena privativa de libertad en una sociedad democrática”.
Añaden los magistrados que “la libertad ideológica de cualquier interno ha de permanecer intacta y no puede ser erosionada durante el tiempo de cumplimiento. Nuestro sistema penitenciario no autoriza intromisiones en el espacio ideológico de los reclusos. El Sr. Sánchez –señala el auto referido a este acusado— no puede ver agravado su estatuto jurídico por su identificación con un proyecto independentista de ruptura”.
Así, explica que Jordi Sánchez “no ha sido condenado por suscribir una determinada concepción política. Su autoría se vincula a los hechos descritos en el factum de la sentencia dictada por esta Sala. La ruptura de las reglas que delimitan el funcionamiento normal de cualquier estado de derecho y la promoción de incidentes violentos llamados a demostrar que la competencia de los Juzgados y Tribunales ordinarios tenía que detenerse a las puertas de una consejería autonómica, son las razones que están en la base de la condena ahora en ejecución”.
“Despojar de capacidad ejecutiva a las resoluciones judiciales, recurriendo para ello a la incontrolada movilización ciudadana, implica la comisión de un delito de sedición, con independencia de la ideología que suscriba el autor de esa conducta”, destaca el tribunal.
Junqueras: “Venganza de nuevo”
El presidente de ERC, Oriol Junqueras, ha acusado al Alto Tribunal de dictar “venganza de nuevo”
″¡Un abrazo enorme, Carme (Forcadell) y Dolors (Bassa)!”, ha añadido en un mensaje en su cuenta de Twitter .
Sànchez y Turull ven “venganza del Estado”
El secretario general de JxCat, Jordi Sànchez, y el exconseller Jordi Turull han asegurado este viernes que ven “venganza del Estado” en la decisión del Supremo. “El escarmiento, la venganza de Estado y la aplicación del derecho penitenciario del enemigo no deja ningún margen para las sorpresas”, ha tuiteado Turull.
Tampoco le supone una sorpresa la decisión del Supremo a Sànchez, que cree que la tenacidad del Estado y del TS para intentar “hundir” a los presos del 1-O es constante y previsible.
“Retuercen la ley, cambian jurisprudencia, destrozan garantías penales y derechos. España lo vale. Y aquí, mientras, aún buscamos el hilo perdido que nos hizo ser tan fuertes el 1-O”, ha apuntado.
Cuixart insiste en pedir “amnistía y autodeterminación
El presidente de Òmnium Cultural, Jordi Cuixart, ha insistido este viernes en pedir “amnistía y autodeterminación” tras la decisión judicial
“No lo olvidemos: los presos y los exiliados no somos la visualización de ninguna derrota. Hoy más que nunca, amnistía y autodeterminación. Serenidad, coraje y ni un paso atrás. ¡Viva Cataluña libre!”, ha destacado en Twitter.
En un comunicado posterior, Òmnium ha acusado al Supremo de “jugar sucio” al denegar el tercer grado a los presos del 1-O, por lo que sitúan la amnistía como el único antídoto posible.
“Injusticia, venganza y arbitrariedad” para Torrent
El presidente del Parlament, Roger Torrent, ha asegurado que ve “injusticia, venganza y arbitrariedad” en la decisión del Supremo.
“Nacionalismo judicial que pasa por encima de todos los derechos fundamentales. Todo el apoyo, compañeras y compañeros”, ha dicho en un apunte en Twitter.