Sánchez no conocía la decisión de EEUU sobre Janssen pero dice que los "parones" demuestran las garantías
Advierte de "semanas duras" en los datos pero insiste en acabar con el estado de alarma el 9 de mayo.
Las primeras dosis de la vacuna Janssen llegan a España este miércoles. Era una noticia esperanzadora, al unirse en el plan a las Pfizer, Moderna y Astrazeneca. Todo a ritmo de crucero para llegar al objetivo del 70% de personas españolas ‘pinchadas’ a finales de agosto.
Pero, de repente, ha llegado un revés desde Estados Unidos. A la misma vez que salía Pedro Sánchez en La Moncloa para explicar el ambicioso plan de reformas con fondos europeos, se conocía allende el Atlántico que los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades de Estados Unidos (CDC) y la Administración de Drogas y Alimentos (FDA) han recomendado que se suspenda el uso de la vacuna de Janssen, filial de la multinacional estadounidense Johnson & Johnson, tras haber registrado seis casos de un tipo de coágulo sanguíneo “raro y grave”.
Al presidente le han preguntado si esto afectará a la hoja de ruta del Gobierno para la vacunación y él ha dicho que desconocía esa información que llegaba desde Estados Unidos. Por eso, no ha concretado si en España se va a seguir el mismo camino (siempre se sigue el criterio de la UE). Poco después, se ha sabido que la propia compañía decidía paralizar su envío de vacunas a Europa tras lo ocurrido en EEUU.
Posteriormente, ha explicado que está pendiente de lo que diga la FDA a lo largo de la jornada después de plantear su recomendación de suspensión en el país norteamericano.
En todo caso, ha señalado dos cuestiones. La primera es que “todas las vacunas que se están administrando” cuentan “con todas las garantías” y las “seguridades”. “El análisis riesgo/beneficio es absolutamente desequilibrado en favor del beneficio, de salvar vida, de inmunizarlos”, ha comentado.
Por ello, ha incidido en que en el sistema de controles “el que se produzcan este tipo de parones no deja de demostrar las garantías del propio proceso de vacunación”. “El proceso de vacunación cuenta con todas las garantías”, ha señalado, para decir que “cuestión distinta” es que “cuando existan este tipo de episodios, tenemos que frenar y ver los episodios”. “A partir de ahí tomar decisiones, como en el caso de Astrazeneca”, ha añadido.
Respecto al escenario que se avecina, Sánchez ha advertido de que serán unas “semanas duras” pero ha insistido en que trabaja para que no tener que prorrogar el estado de alarma desde el 9 de mayo (último día del actual).
De esta manera ha respondido a los diferentes presidentes autonómicos que apuesta por la prórroga, como el gallego Alberto Núñez Feijóo y el vasco Iñigo Urkullu. Para el presidente, hay herramientas jurídicas “suficientes”. En este punto, ha recordado que los tribunales están avalando las decisiones tomadas en el seno del Consejo Interterritorial de Salud (órgano que reúne a Sanidad con las autonomías).