Sánchez presenta su plan de recuperación: "Queremos crear más de 800.000 puestos de trabajo en los próximos tres años"
Este plan pretende movilizar 72.000 millones de euros procedentes de la Unión Europea entre 2021 y 2023.
Pedro Sánchez ha esbozado su Plan Marshall para España. El presidente del Gobierno ha presentado este miércoles, en el palacio de La Moncloa, el Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia de la Economía Española, que se remitirá a Bruselas antes del 15 de octubre. “El plan para una nueva modernización de España”, ha señalado.
Este plan pretende movilizar 72.000 millones de euros procedentes de fondos de la Unión Europea entre 2021 y 2023. Una inversión que permitirá la creación de más de 800.000 empleos en los próximos tres años. “La misión es la creación de cientos de miles de puestos de trabajo. Queremos crear más de 800.000 puestos de trabajo en los próximos tres años”, ha afirmado.
A pesar de que se trataba de un acto con la vista puesta en Bruselas, la puntualidad no ha sido su fuerte. El acto que estaba previsto para las 11 horas, pero que se ha retrasado más de 45 minutos. Al menos ha comenzado con una interpretación de la canción Oda a la alegría, de Beethoven, el himno de la Unión Europea, a cargo del pianista James Rhodes.
Cuatro ejes transversales
Este plan contiene la estrategia del Gobierno para afrontar la crisis económica derivada de la pandemia del coronavirus. Sánchez lo ha defendido este plan como una oportunidad para cambiar la economía española, como una segunda modernización de la misma. “No se trata de recuperar el PIB perdido. Se trata de convertir el golpe que ha supuesto la pandemia, en una oportunidad. Se trata de crecer de una nueva manera. Se trata de ganar nuestro futuro”, ha afirmado.
El Ejecutivo calcula que la movilización de recursos de este plan de recuperación sirva para generar un impacto en el producto interior bruto (PIB) de más del 2,5% anuales en los próximos tres años. Si esto se cumpliera, la economía española repuntaría un 9,8% en 2021, frente a la previsión del 7,2% anunciada este martes en el nuevo cuadro macroeconómico.
El Gobierno pretende movilizar con este plan gran parte de los fondos europeos. El Consejo Europeo aprobó el pasado mes de julio la movilización de 750.000 millones de euros a través de un fondo de recuperación. España obtendrá un total de 140.000 millones que tiene que invertir durante los próximos seis años.
La movilización de fondos se concentrará entre 2021 y 2024. “El esfuerzo de la movilización de recursos se centrará en los próximos tres años. Vamos a concentramos en proyectos que se puedan poner en marcha en tres años y se puedan ejecutar en ese periodo”, ha afirmado.
El plan presentado este martes se basa en cuatro ejes transversales, que coinciden con las prioridades marcadas por la Comisión Europea: la transición ecológica, la cohesión social y territorial, la digitalización y la igualdad de género.
Los dos ejes fundamentales, que concentrarán la mayor parte de los recursos, son la transición ecológica y la digital. Siete de cada 10 euros del plan estarán destinados a estos capítulos. “La inversión verde representa más del 37% del plan y la transición digital el 33%”, ha señalado.
Sánchez ha anunciado el adelanto de 27.000 millones de euros de los fondos europeos en el proyecto de Presupuestos Generales del Estado (PGE) para 2021, cuya aprobación por parte del Consejo de Ministros se espera para este mes de octubre.
El Gobierno aprobó este martes una subida histórica del techo de gasto superior del 53,7%, que implica que las administraciones públicas podrán gastar hasta 196.000 millones en 2021.
Sánchez ha recordado el efecto que tuvo la pandemia en la economía. “En marzo llegó la pandemia y todo se detuvo. España fue durísimamente golpeada. En ese momento había que salvar vidas y empresas y lo hicimos. Cuando nos enfrentamos a esa pandemia, solo teníamos una opción: responder con esa misma intensidad”, ha recordado.
El presidente ha vuelto a enumerar algunas de las medidas aprobadas durante el confinamiento como los avales para empresas del Instituto de Crédito Oficial, las flexibilización de los expedientes de regulación temporal de empleo (ERTE) y las prestaciones por cese de actividad para los autónomos. “Gracias a ese aval del estado, más de 530.000 empresas siguen con su actividad”, ha señalado.
Una vez más, Sánchez ha pedido el apoyo a los partidos de la oposición tanto para el plan de recuperación como para los presupuestos. “Nunca, al menos desde la Transición, nuestro país ha necesitado tanto la unidad. No reclamo un apoyo ciego, solo una colaboración mínima”, ha afirmado.
También ha tenido palabras de agradecimiento para la labor de la Unión Europea durante la pandemia. “La Unión Europea ha estado a la altura del desafío, ha hecho honor a su nombre y ha dado una respuesta unida. El fondo Next Generation supondrá una movilización histórica de recursos”, ha señalado.
Eliminar los cuellos de botella
Los ministerios serán los encargados de canalizar los fondos europeos. Por eso, el presidente ha anunciado la creación de una comisión interministerial, que presidirá Sánchez, así como una unidad de seguimiento dependiente de Moncloa.
Sánchez también ha anunciado que la próxima conferencia de presidentes, que se celebrará el próximo 26 de octubre y que contará con la presencia de la presidenta de la Comisión Europea, Ursula Von der Leyen, abordará la cogobernanza de los fondos con las comunidades autónomas.
El presidente también ha anunciado que el Gobierno llevará a cabo una serie de reformas legales para eliminar los cuellos de botella para agilizar las inversiones, con cambios por ejemplo en la ley de contratación pública.
Un acto de presentación diferente
A diferencia de lo ocurrido en anteriores ocasiones, la presentación de este plan no ha incluido a invitados presenciales, ni se ha celebrado en un lugar cerrado como la Casa de América, ni siquiera en los jardines, debido a las restricciones sanitarias a raíz de la pandemia que afectan a la ciudad de Madrid.
Esta vez Sánchez ha comparecido en solitario frente a unas pantallas gigantes, desde la que seguían el acto los miembros del Gobierno, embajadores de la Unión Europea, empresarios y agentes sociales conectados desde sus localizaciones por videoconferencia.