Sacrifican a una perra sana porque la última voluntad de su dueña era ser enterrada con ella
La pobre Emma fue eutanasiada primero e incinerada después.
Sorprendente la historia que llega desde la localidad de Richmond (Virginia, EEUU), donde una perra ha sido sacrificada y enterrada junto a su dueña. El problema es que la perra estaba sana y que ha muerto por voluntad (la última, concretamente) de la finada.
La víctima fue Emma, una Shih Tzu perfectamente sana cuya dueña murió en marzo dejando por escrito que no quería marcharse de este mundo sola.
Su última voluntad era que su perra, la pobre Emma, fuera eutanasiada y enterrada con ella. Y así ocurrió.
Según explica la NBC, la perrita llegó el pasado 8 de marzo a un refugio donde, durante dos semanas, el personal estuvo tratando de convencer al albacea de la difunta para que no hiciera realidad la última voluntad de la dueña.
Pero no hubo manera y el día 22 de marzo los familiares decidieron sacrificar al perro. Así que Emma fue trasladada al veterinario, donde fue sacrificada y posteriormente trasladada al crematorio. Sus cenizas fueron introducidas en una urna y depositadas junto a los restos de su difunta dueña.