¿Deberías llevar ropa interior con las mallas de deporte?
Ojo si usas tangas.
Parece que esta duda existe: ¿hay que ponerse ropa interior por debajo de las mallas o los leggings cuando se hace deporte?
Algunos defienden el uso de ropa interior, mientras que otros aluden a los beneficios de prescindir de ella. En parte, el debate se centra en si ir sin bragas o calzoncillos resulta anti higiénico o aumenta el riesgo de vaginosis bacteriana o infecciones por hongos.
"Estos son los dos aspectos principales por los que los pacientes se preocupan", explica al HuffPostScott Osmun, médico obstetra y ginecólogo en Nueva York. "Las bacterias y los hongos suelen crecer en lugares cálidos y húmedos. Odio utilizar esa palabra porque no me gusta, pero es cierto". Y añade: "Cualquier tipo de humedad adicional en la zona vaginal puede favorecer las infecciones por hongos o la vaginosis bacteriana".
Aun así, si estás en la liga contra la ropa interior, tampoco hay de qué preocuparse. Según Osman, "es totalmente seguro no llevar ropa interior cuando se hace ejercicio".
La doctora Mary Rosser, también obstetra y ginecóloga, asegura que es cuestión de preferencia personal. "A la gente le digo: 'Haz lo que mejor te convenga", cuenta. "Algunas personas sienten que tienen que llevar, no les entra en la cabeza la idea de no ponerse".
El material del tejido, clave
Si prefieres ir sin ataduras, deberías tener en cuenta un par de cosas al elegir la ropa de deporte. En concreto, opta por "un material que deje transpirar la humedad", señala Osmun.
El algodón y la licra son dos de las opciones más comunes para la ropa deportiva, pero, según el experto, también resulta efectiva la fibra de bambú. Asimismo, algunasmarcas utilizan tejidos de plata, lo cual reduce el riesgo de desarrollo bacteriano y de infecciones, ya que la plata es un agente antibacteriano.
Además, hay que asegurarse de que la tela sea "lo suficientemente gruesa como para no coger las bacterias del asiento del gimnasio", explicó la doctora Raquel Dardik a Greatist. Rosser apunta que los leggings finos no siempre son la mejor opción.
En cualquier caso, quien decida ponerse ropa interior debe tomar las mismas precauciones. Osmun recomienda ropa interior transpirable con un refuerzo de algodón (esa telita para la entrepierna) para eliminar la humedad del cuerpo durante la actividad física.
"Evitaría algunos tejidos sintéticos, como el poliéster. Este material está bien para una chaqueta si estás en la calle y hace frío o llueve, pero no usaría poliéster para hacer ejercicio", sostiene Osmun. También conviene evitar encajes y satén, ya que no son transpirables y pueden causar irritación.
Después de una sesión de deporte, hay que cambiarse la ropa (que estará sudada) y ducharse lo antes posible, independientemente de que lleves o no ropa interior. "Quítate esa ropa húmeda, porque si esa humedad se queda en la zona vaginal, puede incrementar el riesgo de infecciones por hongos", asegura Rosser, que añade que también produce incómodos roces.
Además, hay que lavar la ropa después de hacer ejercicio (hazlo por ti y por tus colegas de gimnasio), especialmente si no llevas ropa interior.
Sí a la ropa interior, NO al tanga
Lo que sí se recomienda evitar durante las sesiones deportivas es el tanga. Osmun afirma: "El material causa más fricción e irritación, y esto puede provocar pequeños cortes o microabrasiones en la piel, lo cual puede acabar en infecciones bacterianas, con la incomodidad, picor, rojez y dolor que conllevan. Creo que los tangas se deberían evitar para hacer ejercicio. Probablemente sea más seguro ir sin ropa interior que llevar tanga".
La doctora Jill M. Rabintold coincide: "Si tienes alguna bacteria en la parte de atrás de la tela (la E. coli es la más común en el colon) y eres físicamente activo, ese material se puede mover. Con que se mueva un par de centímetros, puede llegar a la vagina o a la uretra. Ese tanga puede depositar bacterias ahí".
Si tienes que llevar un tanga a toda costa para hacer ejercicio, Rosser recomienda optar por uno con un refuerzo de algodón para que absorba la humedad.
Si sueles llevarlos y no has tenido ningún problema, no pasa nada, apunta la experta, "pero hay algunas personas más propensas a infecciones, ya sea urinaria o vaginal, que probablemente prefieran evitar los tangas".
En cualquier caso, Osmun y Rosser coinciden en señalar que ni llevar ropa interior plantea inconvenientes ni tampoco dejar de llevarla. Sólo hay que elegir ropa transpirable y tejidos que eliminen la humedad, lavar bien la ropa después de cada sesión y, si es posible, prescindir de los tangas.
Este artículo fue publicado originalmente en el 'HuffPost' EEUU y ha sido traducido del inglés por Marina Velasco Serrano