Otra semana 'negra' para Juan Carlos I: todos sus frentes abiertos
Ni un día sin un escándalo para el rey emérito y todos se preguntan: ¿qué hará Felipe VI con su padre?
Cobro de comisiones ilegales, estructuras empresariales opacas al fisco, dinero negro, regalos millonarios, cuentas en Suiza y Bahamas...
Las noticias sobre las presuntas corruptelas del rey emérito, Juan Carlos I, padre del actual monarca, Felipe VI, ocupan un día sí y día también las portadas de todos los medios de comunicación y ponen en un serio aprieto a la Casa Real.
Zarzuela guarda silencio tras las últimas informaciones mientras algunos medios aseguran que el rey Felipe ha consultado al Ejecutivo sobre la posibilidad de buscarle otra residencia al emérito e incluso el exilio.
Porque si la semana pasada fueron días duros para la familia real, los últimos cinco días no han sido precisamente plácidos.
Lunes
La semana empezaba fuerte: con la noticia de que Suiza investiga el entramado empresarial por el que, supuestamente, el emérito ocultaba su dinero.
En concreto, según El País, la Fiscalía de Suiza investiga un posible delito de blanqueo de capitales por las transferencias que el entonces monarca realizó a Corinna Larsen en cuentas de bancos de Suiza y Bahamas.
La Fiscalía se centra en la transferencia de 3,5 millones desde la cuenta de Juan Carlos en el banco Mirabaud de Ginebra a una en el banco en el banco suizo Pictet & Cie en Nassau (Bahamas), el mismo paraíso fiscal donde se ocultó el grueso de la donación del rey emérito a Larsen.
Esta transferencia, indica El País, se realizó antes del cierre de la cuenta del emérito en Suiza y se hizo a la cuenta de Dante Canonica, creador y secretario de la Fundación Lucum, la empresa pantalla que usó el rey para ocultar, presuntamente, los casi 65 millones que recibió de Arabia Saudí y que “regaló” a Corinna.
El fiscal suizo Yves Bertossa ha rastreado los 64,8 millones que, en junio de 2012, Juan Carlos I habría transferido a una cuenta de la sociedad Solare de Corinna Larsen en el Banco Gonet & Cie en Nassau (Bahamas). 39 de estos millones acabaron en una cuenta de Larsen en el FieldPoint Private Bank de Nueva York. Y once de ellos, en un tercer salto contable, terminaron finalmente en cuentas de la antigua amiga del rey emérito en sus cuentas en el Reino Unido.
Martes
Ya lo dice el refrán: ni te cases, ni te embarques... a Suiza.
La pasada semana nos enterábamos, gracias a El Confidencial, de que el emérito retiraba cantidades periódicas de unos 100.000 euros mensuales en efectivo de su cuenta en Suiza, donde supuestamente escondió los 65 millones de euros que recibió de Arabia Saudí.
Este martes, este mismo rotativo publicaba el modus operandi de Juan Carlos de Borbón para trasladar el dinero a España.
Según El Confidencial, entre 2008 y 2012, el abogado Dante Canonica transportó “fajos de billetes” en vuelos regulares de Ginebra a Madrid “sin que saltara ninguna alarma” y, por supuesto, sin que fuera declarado ese dinero a la Agencia Tributaria, ya que la ley impide introducir más de 10.000 euros en efectivo de países que no sean miembros de la UE.
Los billetes, cuenta este diario, “eran usados por el conjunto de los miembros de Zarzuela para pagar regalos, viajes, consumiciones y otros caprichos”. Las cantidades con las que viajó Canonica fueron de entre 200.000 euros y 300.000 euros. A veces lo hacía cada dos meses, pero también lo llegó a hacer semanalmente. Uno de los traslados se produjo la semana después del accidente del emérito en Botsuana, que terminó con su famoso “lo siento mucho, no volverá a ocurrir” en abril de 2012.
Ese mismo martes, OK Diario publicaba conversaciones grabadas por el excomisario Villarejo a Corinna Larsen, a quien presuntamente el emérito regaló los 65 millones que recibió de Arabia Saudí.
En los audios publicados por este medio, se escucha a Corinna afirmar que Juan Carlos I contaba con “una máquina para contar billetes” en Zarzuela, donde, según sus palabras, se encontraba el dinero procedente de Suiza.
Miércoles
Lejos de darle un descanso, las informaciones al día siguiente seguían dando disgustos a la Casa Real.
El Confidencial volvía a publicar una importante información sobre el rey Juan Carlos al asegurar que, antes de cerrar su cuenta en Suiza, el ahora emérito retiró 5 millones de euros.
Lo hizo después de su accidente en Botsuana y tras la inquietud de los responsables del banco Mirabaud de Ginebra, donde tenía la cuenta, por la existencia de estos fondos.
Según este rotativo, entre el 1 de enero y el 11 de junio de 2012, Juan Carlos I sacó 4.912.870 euros en total, tal y como figura en un informe de cinco páginas firmado por el propio monarca.
Para colmo de Juan Carlos, ese mismo día, desde la mesa del Consejo de Ministros, la ministra portavoz y de Hacienda, María Jesús Montero, respondía lo siguiente a si el Ejecutivo consideraba “suficientes” las medidas de la Casa Real “para poner un cortafuegos” respecto al emérito:
Días antes, el propio presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, tildó todas estas informaciones de “inquietantes” y agregó que “nos perturban a todos”. “Hay unos medios de comunicación que no miran para otro lado, hay una justicia que está actuando y la Casa Real está marcando distancias respecto a esas informaciones, y es algo que yo agradezco”, añadió el jefe del Ejecutivo.
Jueves
Qué cerca está el fin de semana pero, a la vez, qué lejos queda cuando uno es el rey emérito y se encuentra, un día más, nuevas noticias sobre sus supuestos escándalos financieros.
Esta vez, sobre la empresa offshore que el emérito tenía en Panamá, la Fundación Lucum, de la que según informó El Confidencial, Felipe VI tuvo conocimiento en marzo de 2019.
En ese mismo momento, según este periódico, el ahora rey informó al Ejecutivo de la existencia de esta sociedad propiedad de su padre.
Es la misma sociedad que, según publicó este medio la pasada semana, utilizaba el monarca como pantalla para, supuestamente, esconder los 65 millones de Arabia Saudí. Así consta, según El Confidencial, en un documento publicado por este rotativo.
La empresa se creó en julio de 2008 en Panamá y como beneficiarios aparecen, por este orden: Juan Carlos I, Felipe VI y la princesa Leonor.
Un año después, en marzo de 2020, el actual rey emitía un comunicado anunciando que renunciará a lo que herede de su padre y quitándole la asignación de los Presupuestos.
Viernes
¿Por fin viernes? No para Juan Carlos I.
Según el diario El Mundo, quien fuera su amiga íntima, Corinna Larsen, escribió una carta al jefe de la Casa Real, Jaime Alfonsín, el 5 de marzo de 2019. En ella, asegura que el monarca le pidió que le devolviera los famosos 65 millones de Arabia Saudí que, según declaró ella misma, le había regalado por “gratitud y amor”.
Ella rechazó devolver este dinero argumentando “potenciales acusaciones por delitos financieros”, algo que, según El Mundo, enfadó al monarca, quien la “acusó falsamente de haberle robado sus bienes” y promovió “una campaña de difamación” contra ella.
Estos hechos se corresponden al año en que Juan Carlos I abdicó como rey. En ese instante, el ahora emérito dejó de ser inviolable y por eso la Justicia española investiga los posibles casos de corrupción del monarca sólo desde esa fecha en adelante.
Con este panorama, no es extraño que la ciudadanía se pregunte lo que un periodista le ha preguntado a Felipe VI: ”¿Qué va a ocurrir con el rey emérito?”.