¿Qué le pasa al príncipe Harry? Quiere irse de Inglaterra
Al duque de Sussex y a Meghan Markle les sobran las razones para salir corriendo.
Ya no son solo rumores. El príncipe Harry ha confirmado que la relación con su hermano Guillermo, heredero al trono de Inglaterra, tiene sus más y sus menos. No es el único de sus problemas: aunque parecía que con el paso del tiempo cada uno de sus movimientos y los de su mujer Meghan Markle tendrían menos peso para la prensa sensacionalista, ha ocurrido justo lo contrario. Los medios británicos examinan con lupa cada una de las exhalaciones de aire de los duques de Sussex, por eso no es raro que quieran irse a vivir a África.
La pareja ha valorado la posibilidad de mudarse no solo de país, también de continente, pero querrían hacerlo trabajando en el marco de la Organización de Naciones Unidas. La idea era ejercer ese trabajo, desarrollar acciones benéficas y al mismo tiempo ser los representantes de Reino Unido en el país escogido, según The Sunday Times.
Su primera opción era Ciudad del Cabo —el príncipe ha tenido siempre una estrecha relación con el continente africano—, aunque de momento han descartado (o quizás solo aplazado) sus planes por el aumento de la violencia contra los extranjeros en la zona, según el tabloide británico. Harry no quiere que su presencia empeore la situación.
En cualquier caso al príncipe Harry le sobran las razones para querer romper, aunque sea de manera temporal, con su vida en Reino Unido:
Siempre se han llevado bien y se han mostrado unidos, aunque su relación se empezó a cuestionar cuando el príncipe Harry se casó con Meghan Markle el 19 de mayo de 2018. Los duques de Sussex decidieron separarse del palacio de Kensington para operar desde Buckingham y abandonaron la fundación benéfica que Guillermo y Enrique habían liderado desde hacía años (Royal Foundation). Todos estos pasos avivaron más los rumores.
El factor económico también podría haber quebrantado más su unión: la reina Madre, que tenía una relación muy estrecha con sus bisnietos, dejó más herencia a Enrique que a Guillermo para compensar de alguna forma la diferencia de privilegios entre ambos. Guillermo es el heredero al trono y Enrique queda muy lejos en la línea de sucesión.
Ha sido el propio Harry quien ha aclarado lo que les ocurre realmente en un documental —grabado precisamente durante la gira de los duques de Sussex en África— emitido en la cadena ITV este domingo. “No nos vemos tanto como antes porque estamos muy ocupados, pero lo quiero mucho... La mayoría de cosas se crean de la nada. Pero como hermanos, tenemos buenos días y malos días”, ha explicado. El príncipe ha justificado que “la presión siempre provoca que pasen cosas”, pero ha dejado claro que “son hermanos y lo serán siempre”.
El trato de los hermanos no ha sido el único que ha estado en entredicho. De hecho, la relación más comentada ha sido la de la duquesa de Cambridge y la duquesa de Sussex. Todos los medios están siempre deseando encontrar un acto en el que coincidan públicamente para poder sacar la foto porque, en teoría, no se soportan. Sin embargo, Guillermo y Harry ya insinuaron en su momento que el origen de los problemas eran ellos y sus discrepancias, y no sus respectivas parejas.
Cuando se comprometieron, la pareja era consciente de que todas las miradas estarían puestas en ellos, pero no podían imaginar cómo les afectaría la exposición pública. Ha habido comentarios tan hirientes y desafortunados que Merghan Markle y el príncipe Harry han anunciado querellas contra varias cabeceras por vulnerar su intimidad, como Daily Mail, que publicó una carta que Meghan Markle envió a su padre, o Daily Mirror y The Sun, por hackear, supuestamente, el teléfono personal del príncipe Harry.
Será Keith Schiling quien les represente en los tribunales, en lugar del bufete al que suele recurrir la familia real británica. La elección de este abogado, conocido por su ‘fiereza’, es una declaración de intenciones contra los medios. Keith Schiling ha ganado casos en los que representaba a famosos como Naomi Campbell, Brad Pitt y Angelina Jolie o J.K. Rowling, entre otros.
En cuanto a cómo están afectando todos los comentarios a la pareja, el director del documental emitido en ITV escribió en The Sunday Times que se encontró con unos duques de Sussex “vulnerables y magullados”.
Incluso Meghan Markle se lamenta abiertamente en el vídeo de que nadie se ha molestado en preguntarle algo tan sencillo como ‘cómo estás’. La presión ha sido tal que, reconoce, ha llegado a afectar a su salud mental. “Cualquier mujer, especialmente cuando está embarazada, es muy vulnerable, y eso ha puesto las cosas muy difíciles”, dice en relación a la atención mediática durante su embarazo. “Y luego, cuando tienes un bebé... ya sabes, especialmente para una mujer, es demasiado. Así que si añades todo esto [la atención mediática] al hecho de ser madre primeriza y de estar recién casada...”, explica visiblemente afectada. Ella se ha visto obligada a vivirlo “entre bastidores”.
Esta es precisamente la mayor preocupación del príncipe Harry: Meghan Markle. El duque de Sussex tildó todas las informaciones publicadas como parte de una campaña ‘despiadada’ contra la duquesa. Incluso se emocionó y rompió a llorar en público en una gala benéfica hablando de su familia, Meghan Markle y Archie Harrison. Harry ha tenido que enfrentarse al mismísimo Donald Trump con una mirada fulminante —que a veces es mucho más significativa que una palabra— después de que el presidente de Estados Unidos dijera que Markle es “asquerosa”.
La prensa local no ha sido precisamente conciliadora con la duquesa de Sussex y con una persona tan vulnerable como un bebé, sea de la familia que sea. Se han referido en numerosas ocasiones a su color de piel. Incluso la BBC llegó a despedir a un periodista por escribir un tuit racista tras el nacimiento de su hijo Archie Harrison. La cadena declaró que fue un serio error de juicio que va “en contra de los valores que nosotros como cadena pretendemos encarnar”. No fue el único comentario racista en los medios. De hecho, la CNN publicó un artículo en el que se preguntaba ‘cómo de negro sería el bebé real’.
Los cuatro vuelos en once días de la pareja en un jet privado durante las vacaciones de verano puso a la pareja en el punto de mira. La sociedad británica criticó que no recurrieran a vuelos regulares, pero el príncipe zanjó la polémica días después en un viaje ea Ámsterdam: “A veces, en casos puntuales, es necesario garantizar que mi familia esté a salvo. Sinceramente, es tan simple como eso”.
Por otro lado, los duques de Sussex también indignaron a los británicos por sus gastos escandalosos publicados en las cuentas del último año fiscal, a pesar de que las cantidades eran menores que las de los duques de Cambridge. Sin embargo, los gastos del príncipe Guillermo y de Kate Middleton no generaron tanto revuelo. Lo que invirtieron en amueblar y decorar su residencia no fue ni la mitad de lo que habían invertido años antes los duques de Cambridge (2,3 millones y 5 millones, respectivamente).
Se ha criticado, incluso, que sean de las pocas parejas reales que no tiene ningún reparo en mostrarse cariño en público.
Markle reconoce en el documental que todo le ha afectado a su salud mental, algo que ha tenido muy preocupado al príncipe Harry. De hecho, el duque de Sussex expresaba en un comunicado su temor a que la historia de su madre, Lady Di, volviera a repetirse.
Por otro lado, el príncipe Harry reconoció recientemente que tuvo que recurrir a un especialista, cuando ya era adulto, para superar el trauma por la muerte de su madre. Además, Harry ha empezado a trabajar de manera conjunta con la periodista Oprah Winfrey para la creación de un documental sobre salud mental que será distribuido por Apple. La serie compartirá “historias de personalidades fuera de lo común que resistieron a las situaciones más difíciles, para permitir entendernos mejor a nosotros mismos y a nuestro entorno”, explicó en un comunicado.
A partir de noviembre, la pareja se tomará seis semanas libres. Ocuparán ese tiempo especialmente en viajar a Los Ángeles (Estados Unidos) y pasar en familia el 28 de noviembre, día de Acción de Gracias. Lo celebrarán con la madre de Meghan Markle, Doria Ragland.
La primera parte de las navidades la pasarían con la familia real británica. Sí, incluidos los duques de Cambridge. Pero siguen pensando en África para formar un hogar.