PSOE y Podemos discuten cómo negociar la derogación de la reforma laboral

Los socios del Gobierno de coalición se reunirán este lunes en la mesa de seguimiento del Acuerdo gubernamental entre PSOE y Unidas Podemos (UP) para intentar reconducir la situación después de la crisis abierta por la reforma laboral y la reacción airada de Podemos a la inhabilitación de su ya exdiputado Alberto Rodríguez.

Fuentes del Gobierno han confirmado a EFE la celebración de la reunión al objeto de reconducir las tensiones nacidas entre los socios en los últimos días Las mismas fuentes recordaron la solicitud hecha a cabo el pasado viernes por UP para que la comisión de seguimiento del Acuerdo de Gobierno entre los dos partidos se reuniera y se abordara en ella la reforma laboral en el marco de un clima de “entendimiento y coordinación”.

Ambas partes coinciden en que el gran motivo de discusión ahora es cómo será la negociación con los agentes sociales y económicos en la recta final para derogar la reforma laboral y quién llevará la voz cantante. El compromiso con la Unión Europea es que este asunto esté resuelto el 31 de diciembre.

Hasta ahora, el liderazgo del diálogo social la ha llevado hasta ahora el Ministerio de Trabajo, comandado por la vicepresidenta Yolanda Díaz, que desde hace siete meses negocia con sindicatos y empresarios en las reuniones que se celebran los miércoles. Sin embargo, la reforma laboral es considerada un “asunto nuclear” y el PSOE ha querido tener más peso en estas negociaciones. De ahí que entrase en liza la también vicepresidenta de Asuntos Económicos, Nadia Calviño, cuya tarea ha sido respaldada por el presidente, el socialista Pedro Sánchez.

“Somos el partido mayoritario del Gobierno y todo el mundo entiende, también los sindicatos, que estemos en esta negociación, es lo lógico”, sostienen fuentes del bloque socialista citadas por la Cadena SER, que insisten en que todo lo que se acuerde tiene que tener luego el “beneplácito de Bruselas” y que para atar ese cabo es muy relevante que no sólo Díaz dirija las conversaciones sino que Economía, con Calviño al frente, esté implicada directamente en las conversaciones.

La reforma laboral, junto a la inhabilitación del diputado de UP Alberto Rodríguez tras la sentencia del Tribunal Supremo y el posterior anuncio de querella de Podemos contra la presidenta del Congreso, Meritxell Batet, han tensionado las relaciones entre los socios de Gobierno.

Esta misma noche del domingo se ha sabido que el exdiputado de Podemos Alberto Rodríguez no se querellará contra Batet, a propuesta de los nuevos abogados contratados para preparar el recurso a su condena por agresión a un agente policial dictada por el Tribunal Supremo, aunque sí recurrirá su condena para recuperar el escaño, según dijeron a Efe fuentes de su defensa.

La respuesta de los morados a la incursión de Calviño fue un tuit de la líder de Podemos, Ione Belarra, llamando a que se reuniera la comisión de seguimiento de la coalición. Durante el fin de semana, ambas partes han buscado rebajar la tensión con llamadas entre Félix Bolaños, ministro de Presidencia, y Yolanda Díaz y Adriana Lastra, vicesecretaria general del PSOE, y Belarra.

La ministra de Hacienda, María Jesús Montero, ha estado hablando con los sindicatos para trasladar directamente cuál es la posición del PSOE, que insiste en que sí que quieren derogar la reforma laboral, pero que no pueden ser “convidados de piedra” en un asunto tan “trascendental y transversal” como es la regulación de las relaciones laborales en España.

“Que se aclare”

Calentando motores para la reunión de esta tarde, la vicepresidenta segunda Yolanda Díaz ha pedido esta mañana PSOE, como “otra parte mayoritaria del Gobierno”, que “se aclare” en el debate sobre la derogación de la reforma laboral del PP. “Sobre todo porque están dando declaraciones diferentes”, ha apuntado.

En declaraciones a los medios tras inaugurar este lunes en Santiago el foro Diálogos para el futuro del envejecimiento -un evento en el que colaboran distintas instituciones como el Parlamento Europeo-, Díaz ha criticado que haya “una parte del Gobierno que sigue discutiendo a día de hoy los contenidos” sobre la modificación de la legislación laboral.

Preguntada sobre la convocatoria de la mesa de seguimiento del pacto de coalición que reclamó Unidas Podemos tras denunciar “injerencias” de Calviño, la vicepresidenta segunda ha pedido “dejar trabajar a los negociadores”, aunque ha reconocido que estos contactos se producen en un “momento delicado”. “Porque no solamente es que estemos hablando de un acuerdo de Gobierno al que nos han acompañado fuerzas políticas en esta investidura, sino que nos acompaña la convicción de que el modelo laboral del PP no sirve para el momento actual”, ha explicado.