El prior del Valle de los Caídos se agarra a un clavo ardiendo: "Nuestra madre celestial vela por todos"
El religioso pide "serenidad" pese a las "inquietantes" noticias de la Ley de Memoria Democrática que le puede sacar de Cuelgamuros.
Los religiosos que administran Cuelgamuros andan preocupados por la Ley de Memoria Democrática que el Gobierno ha alumbrado esta semana. El prior del Valle de los Caídos, Santiago Cantera, dice que su presencia en el mausoleo depende de fundamentos “que no se pueden anular sin más”.
Cantera envió una carta el martes los padres de los niños de la Escolanía antes de la aprobación de la ley que le puede sacar de ahí para intentar tranquilizarlos: “Nuestra presencia en el Valle no depende única ni exclusivamente de la existencia de la Fundación [de la Santa Cruz del Valle de los Caídos].
El prior pide a los padres “serenidad” pese a las “inquietantes” noticias que advierten de que sus días en la abadía pueden estar contados y lanza una pulla a algunos medios de comunicación que informan de ellas con “inquina”. Además, Cantera considera que “no es un dato bueno” que el texto legislativo contemple la extinción de la Fundación de la Santa Cruz del Valle de los Caídos y se agarra a un clavo ardiendo: “No dice nada de la desaparición o expulsión” de la comunidad benedictina ni de la Escolanía.
El prior ha explicado que lo que ha hecho el Gobierno es aprobar el anteproyecto de ley para que en septiembre comience sus trámites en el Congreso, “donde todo su debate puede durar meses o incluso prolongarse un año”.
Pero Cantera teme que el Gobierno quiera “agilizar su aprobación”. Pero ya tiene un plan: habrá “recursos y factores que pueden demorar el procedimiento”. Y ya cuenta con la ayuda algunos partidos, en referencia velada a Vox, para que le echen una mano: “Al menos un partido político interpondrá un recurso de inconstitucionalidad”.
Cantera sigue en la carta poniéndose a pensar en el futuro y explica que, una vez que la ley quede esté en las Cortes, habrá de regularse el nuevo régimen jurídico del Valle por un real decreto. Y vuelve a advertir: “En caso de ser francamente negativo podría recurrirse y ello supondría otra prolongación en el tiempo”.
Mientras tanto, el prior invita a “guardar la paz y la calma” y añade que los monjes seguirán su vida en el Valle y el curso académico “con toda tranquilidad y normalidad”. “Sabiendo que Dios y nuestra Madre celestial velan por todos nosotros”, concluye. Amén.