Ellen MacArthur, Premio Princesa de Asturias de cooperación internacional 2022
Por ser la emprendedora social británica "un referente en la lucha para una mejor utilización de los recursos naturales".
La exregatista y emprendedora social británica Ellen MacArthur ha sido galardonada con el Premio Princesa de Asturias de Cooperación Internacional 2022, según ha hecho público este jueves el jurado encargado de su concesión.
En su opinión, es “un referente en la lucha para una mejor utilización de los recursos naturales y por acelerar la transición hacia la llamada economía circular”.
“Ellen MacArthur trabaja con su Fundación para cambiar el actual paradigma de producción y consumo mediante un aprovechamiento de los recursos basado en la reducción, la reutilización y el reciclaje de materiales de forma sostenible. Su capacidad de promover alianzas con gobiernos, empresas, instituciones científicas y sociedad civil ha contribuido a forjar el primer gran acuerdo internacional que será jurídicamente vinculante contra la contaminación por plásticos”, destaca la nota del jurado.
Han valorado además “su trabajo para fomentar un cambio en la cultura de producción y consumo responsable en la industria textil, entre otros de sus grandes compromisos”.
Ellen Patricia MacArthur nació en Whatstandwell (Derbyshire, Inglaterra) el 8 de julio de 1976. Regatista profesional, en 2005 hizo historia al completar la vuelta al mundo en solitario más rápida hecha por ningún navegante. En 2003 fundó la Ellen MacArthur Cancer Trust, que ayuda a jóvenes enfermos de cáncer a superar sus problemas a través de la navegación. En 2010 creó la Fundación Ellen MacArthur, organización sin ánimo de lucro que tiene como objetivo cambiar los hábitos de producción y consumo de la economía mundial y acelerar la transición hacia la llamada economía circular.
Qué es la economía circular
La economía circular propone un cambio sistémico en la producción industrial para un mejor aprovechamiento de los recursos, basado en la reducción, la reutilización y el reciclaje de materiales.
La Fundación Ellen MacArthur se ha convertido en un referente en la lucha por una mejor utilización de los recursos, al introducir los principios de la economía circular en la misión de estas instituciones. Impulsa lo que llama iniciativas sistémicas dentro del proyecto Mainstream, en colaboración con el Fondo Económico Mundial.
Sus ámbitos principales de investigación y participación son cuatro: la iniciativa de alimentos, que reúne y estimula a los actores clave del sector para hacer sostenible el sistema de producción y consumo de comida; la iniciativa Nueva Economía del Plástico, que persigue la reducción del uso de este material; en 2017 la Fundación Ellen MacArthur publicó el informe Una nueva economía textil: rediseñando el futuro de la moda, germen de la campaña Make Fashion Circular, que presentó en 2018 junto con la diseñadora Stella McCartney y el apoyo de otras firmas de ropa, que analiza y promueve la necesidad de la transformación hacia un sistema que utilice mejores materiales, promueva la producción sostenible y fomente la reutilización de recursos dentro del sector textil; y por último, la lucha frente al cambio climático a través de los principios de la economía circular para la reducción de la emisión de gases de efecto invernadero y otros elementos contaminantes.
Además, la Fundación Ellen MacArthur ofrece una serie de recursos informativos y plataformas educativas como Circulytics, orientado a las empresas, o Economía Circular en Ciudades con claves destinadas a agentes públicos. Organiza encuentros y actividades de divulgación y formación para difundir sus ideas y objetivos. También publica informes y programas, disponibles de forma gratuita, como la guía Toolkit for Policymakers o el proyecto ResCoM, con el mismo objetivo.
En 2020 políticos, directivos y otras personalidades se unieron a su llamamiento para promover una recuperación económica tras la crisis provocada por la pandemia de la covid-19 a través de un uso responsable de los recursos y la economía circular. En febrero de 2022, la Fundación lanzó, junto con WWF, una campaña para pedir a los líderes mundiales un gran acuerdo internacional para la reducción de plásticos. Un mes después, los representantes de ciento setenta y cinco países participantes en la Asamblea de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente, celebrada en Nairobi (Kenia), acordaron la creación del primer tratado internacional jurídicamente vinculante contra la contaminación por plásticos, considerado por Inger Andersen, directora ejecutiva del Programa de la ONU para el Medio Ambiente, el pacto internacional ambiental más importante desde el Acuerdo de París contra el Cambio Climático.