Por qué la Policía acabó en casa de Paz Padilla
A pesar de la presencia de los agentes, la presentadora "era feliz", ha confesado.
El pasado sábado Paz Padilla la montó gorda en su casa de Villaviciosa de Odón, en Madrid. Tanto que varios agentes de Policía se personaron dos veces en el domicilio de la presentadora de Sálvame (Telecinco), a los que la propia humorista abrió la puerta. Los vecinos se habían quejado del volumen de la música. Aunque lo más curioso de todo no es que la Policía llamara la atención a la gaditana, sino el motivo de la fiesta.
Paz Padilla explicó este lunes en Sálvame que estaba celebrando con familiares y amigos el primer aniversario de la muerte de su marido, Antonio Juan Vidal —que falleció a consecuencia de un tumor cerebral—, y que había organizado una fiesta homenaje.
“Invité a sus amigos y a mis amigos. La titulé [la fiesta] ‘El país de nunca jamás’, porque es donde creo que él está. Lo pasé muy bien. Vino dos veces la policía. Les dije: ’Si la música no está fuerte (...) Hicimos poesía y cantamos”, reveló.
Además, confesó que aunque fue “la Policía” ella “era feliz porque Antonio estaba ahí”: “Yo creo que la vida continúa de una forma energética… pienso en la física cuántica y creo en los universos paralelos, creo que está cerca”.
La fiesta estuvo cargada de humor —de una manera bastante peculiar, al estilo de la presentadora— y fueron todos “disfrazados de alguien muerto”. Ella de Amy Winehouse.
Padilla confesó, que a pesar de llevar bien el duelo, recuerda a su marido “todos los días” y desveló que puso en su lápida “espérame para volver a encontrarnos. Te quiero Antonio”.
“Le doy las gracias por haberlo querido tanto y que me quisiera, sé que lo voy a sentir siempre”, relató, para añadir que lo recordará con “amor”, un sentimiento que está por encima del “dolor”, y no con “angustia ni sufrimiento”.