Pedro Sánchez: "No se juzgan instituciones, se juzgan personas"
El presidente del Gobierno "respeta" la decisión tomada por la Casa Real porque "marca distancia sobre supuestas conductas que pueden calificarse de irregulares".
Pedro Sánchez ha expresado su “absoluto respeto” a las decisiones tomadas por la Casa Real “por cuanto hay detrás de la decisión: distanciarse de supuestas conductas cuestionables y reprobables de un miembro de la Casa Real”.
El presidente del Gobierno ha valorado así la medida adoptada por Juan Carlos I de abandonar España ante las polémicas surgidas en torno a su figura en los últimos meses.
Durante su comparecencia desde La Moncloa para hacer balance del curso político, el presidente del Gobierno, ha aplaudido el paso dado por Zarzuela “por lo que representa ante hechos que pueden ser objeto de investigación judicial” y ha querido separar el debate entre la figura del monarca emérito y la institución monárquica:
“En este país ha habido casos supuestamente de corrupción vinculados a partidos y agentes sociales y no se ha puesto en duda el sistema de partidos ni a los agentes sociales. No se juzgan instituciones, se juzgan personas. Don Juan Carlos ha dicho claramente que está a disposición de la Justicia si fuera necesario, como cualquier otro español”, ha añadido.
El presidente ha insistido en el necesario reforzamiento de “las instituciones” con la misma idea que ha defendido en declaraciones previas: “Estamos inmersos en una pandemia y necesitamos estabilidad e instituciones robustas y esas instituciones deben abonarse con transparencia y ejemplaridad y la línea de la Casa Real es la adecuada”. Por ello, ha remarcado, “el Gobierno que yo presido considera plenamente vigente el pacto constitucional”.
Preguntado por los periodistas por las declaraciones de miembros del Gobierno pertenecientes a Unidas Podemos como Pablo Iglesias, Irene Montero o Alberto Garzón, muy críticos con la decisión del rey, Sánchez no ha querido hacer ninguna valoración. Del mismo modo ha eludido ofrecer detalles sobre el paradero o el modo de manutención del rey fuera de España: “No tengo la información de dónde está”, ha señalado en varias ocasiones.
En una larga respuesta, basada en cinco puntos, y que ha sido replanteada constantemente por los periodistas, el líder del Ejecutivo ha defendido que lo ocurrido en las últimas semanas “es la respuesta de una democracia vigorosa”. “Los medios han hecho su trabajo y han dado a conocer hechos; los jueces están actuando y la Casa Real ha puesto distancia sobre estas supuestas actuaciones ilegales”.
Sin querer entrar en detalles del papel jugado por el Gobierno en la gestión de la salida del rey emérito -“los asuntos de despachos entre el Jefe de Estado y presidente del Gobierno son secretos” ha repetido en distintos momentos-, ha insistido en el “respeto” a los hechos de este lunes, “porque muestran que la Casa Real marca distancia sobre supuestas conductas que pueden calificarse de irregulares. Y no tengo nada más que añadir”.