Pablo Iglesias, sobre el "la azotaría hasta que sangre" a Mariló Montero: "Me da muchísima vergüenza"
El líder de Podemos también reconoce que no comparte algunas afirmaciones que hizo en el pasado sobre Venezuela pero niega financiación desde este país.
Pablo Iglesias, líder de Podemos, ha comparecido en la comisión que investiga la financiación ilegal de los partidos políticos del Senado para explicar la financiación de su formación.
Durante la misma, se han emitido extractos de opiniones de Iglesias sobre Venezuela y el senador del PP Luis Aznar le ha recordado un mensaje privado que compartió el secretario general de Podemos sobre la presentadora Mariló Montero, en el que decía que "la azotaría hasta que sangre".
"Pido disculpas, siento muchísima vergüenza de haber hecho un comentario machista, aunque fuera un Telegram privado. Muchísima vergüenza", ha contestado Iglesias.
También se ha referido a una frase suya en 2014 sobre Hugo Chávez. "Me emociona hablar del comandante, se le echa mucho de menos, cuántas verdades ha dicho este hombre", pronunció entonces.
"No comparto algunas cosas que dije en el pasado y creo que la situación política y económica en Venezuela es nefasta. Yo he podido decir cosas que políticamente ahora no comparto, y rectificar en política está bien. Y estaré encantado de debatir en cualquier foro cosas que dije en el pasado y me equivoqué".
Estas han sido las dos anécdotas dentro de una extensa comparecencia en la que el líder de Podemos ha negado que haya trabajado alguna vez para el Gobierno venezolano y que Podemos haya recibido financiación de Venezuela. Además, ha recordado que todas las querellas que han sembrado dudas sobre ese asunto han sido archivadas por los tribunales.
Tan exhaustiva han sido su respuestas que el senador del PP Luis Aznar le ha interrumpido en varias ocasiones para intentar que el líder de Podemos acortara sus intervenciones y concretara si trabajó para el Gobierno de Venezuela.
Al menos en seis ocasiones Aznar le ha preguntado si realizó trabajos de asesoramiento para Venezuela, a lo que Iglesias ha contestado reiteradamente que eso no era el objeto de la comparecencia, sino la financiación de Podemos.
El dirigente de Podemos ha asegurado que Podemos no ha recibido financiación de Venezuela ni de ningún gobierno extranjero ni organización exterior. "Nuestra formación política se financia con arreglo a la ley", ha insistido. Si el PP quiere indagar en su vida, ha agregado, puede crear una comisión de investigación como esta sobre la financiación de partidos o como la dedicada a la tesis de Pedro Sánchez.
A propósito de la financiación desde el exterior, Iglesias ha leído una carta del rey emérito, Juan Carlos I, dirigida al Sha de Persia en 1977 pidiéndole que aportara diez millones de dólares para apoyar a Adolfo Suárez ante las primeras elecciones municipales tras el franquismo y para asentar la democracia y la monarquía. "Cuando se trata de investigar la financiación iraní no preguntan tanto", le ha dicho al PP.
La interrupciones y rifirrafes entre los dos parlamentarios han sido constantes al enrocarse Iglesias en que no iba a responder sobre nada distinto a la financiación de Podemos desde que se fundó en 2014, tampoco sobre la fundación CEPS (Centro de Estudios Políticos y Sociales) en la que trabajaron algunos de los fundadores del partido morado antes de crearlo.
"Si pretende sugerir si ha habido financiación del Gobierno de Venezuela a mi partido, le digo que no", ha enfatizado Iglesias, que también ha negado haber cobrado en los programas de televisión en los que ha participado en otros países y ha dicho que en España sólo ha recibido pagos cuando ha participado como colaborador.
El senador popular ha insistido en que el líder de Podemos concretara si él personalmente ha trabajado para Venezuela, a lo que finalmente, y tras casi una hora de explicaciones, Iglesias ha contestado que no.
Durante la comparecencia, Iglesias y Aznar se han enzarzado continuamente en sus preguntas y respuestas en un intento el primero de exponer con exhaustividad sus argumentos, mientras el senador del PP intentaba que fuera más concreto y breve.
"Es que aburre usted a las cabras", ha llegado a afirmar Luis Aznar a lo que Iglesias ha seguido replicando que igual que respeta sus preguntas, también el senador tiene que respetar cómo se organiza sus respuestas.
Aznar le ha reprochado que en su partido Pablo Echenique no tenía dado de alta en la Seguridad Social a su asistente; que su portavoz en el Senado, Ramón Espinar, vendió una vivienda de protección oficial de forma "irregular"; y que en Podemos hay personas implicadas en casos de "violencia de género" o hasta de "pederastia".
Afirmaciones con las que Luis Aznar replicaba al líder de Podemos cuando éste le ha echado en cara que el PP es una "vergüenza" para la democracia porque cuando sus dirigentes van "a los juzgados, salen esposados y acaban en la cárcel".
"Míreme a los ojos para decirme eso", le ha espetado Aznar, a lo que Iglesias ha respondido: "Se lo digo a los ojos, su formación es una vergüenza para la democracia, hay presos del PP en las cárceles por robar a los españoles".
Luis Aznar ha elevado aún más el tono: "Es usted un falso, con un discurso mezquino, bolivariano, radical, que ya no le ha funcionado en Andalucía".
El senador del PP no se ha conformado con las explicaciones del líder de Podemos, y después de cuatro horas de explicaciones, ha seguido dando por hecho que Iglesias y su partido recibieron dinero de Venezuela e Irán.
Le ha culpado además de alentar el 15-M y los escraches de políticos y jueces, que consideraban un "jarabe democrático", y le ha reprochado que siga "cabalgando contradicciones" hoy al llamar "a las barricadas" tras no aceptar el resultados de los comicios andaluces y escandalizarse si le "asaltan" en una librería.
"¡Ustedes, que proceden de lo peor de los gobiernos latinoamericanos!", ha exclamado.
Contradicciones que, según el senador 'popular', se ven también en la vida personal de Iglesias porque "ha tenido como portavoces en su partido a sus dos compañeras sentimentales y que ahora vive en un chalé en Galapagar" a las afueras de Madrid.