Otra especie acuática menos... y ya van unas cuantas
La extinción de una especie supone un mazazo para la conservación de la biodiversidad en nuestro planeta. En las últimas décadas el ritmo de pérdida de especies es muy elevado y la mayor parte de la sociedad es consciente de ello; pero solo nos damos cuenta de estas extinctiones cuando ocurren en el medio terrestre. Cuando hablamos del medio marino o dulciacuícola, que agrupa a ríos o lagos, posiblemente no seamos capaces de recordar el nombre de una especie que se haya extinguido en los últimos años.
Una de las últimas en extinguirse ha sido un pez remo (paddlefish en inglés) gigante en el río Yangtze en China. Se trata de una especie que llegaba a superar los 3 metros de longitud y que podía vivir hasta más de 20 años. Desde 2003 no se había registrado ningún individuo vivo, y se cree que desde 1993 era incapaz de reproducirse por el bajo número de ejemplares y porque sus poblaciones se quedaron incomunicadas por la construcción de una presa. El momento de la extinción se ha calculado que ocurrió entre 2005 y 2010. En 2017 y 2018 se llevaron a cabo una gran cantidad de muestreos a lo largo del Yangtze, y no se encontró ningún ejemplar de esta especie, pero lo más preocupante fue que además de esta especie tampoco se registraron individuos de 104 especies más, de las cuales muchas de ellas solo se encuentran en esa cuenca dulciacuícola.
Ninguna noticia ha salido en los periódicos sobre la extinción de este pez remo en nuestro planeta, y se suma a una lista que cada vez es más extensa de especies que se encontraba al borde del abismo de la desaparición y han sucumbido a la presencia humana y al cambio climático, se estima que son cerca de un millón las que podría desaparecer en los próximos años.
¿Y cuántas de ellas son acuáticas y no aparecerán en ningún titular?