Oenegés de infancia, "preocupadas" por posibles devoluciones en caliente de menores en Ceuta
Y recuerdan: "Las devoluciones de niños y niñas no son legales en nuestro ordenamiento jurídico y no pueden ser toleradas".
La Plataforma de Infancia se ha puesto en contacto con los Ministerios de Interior, de Inclusión y Migraciones, y de Derechos Sociales y Agenda 2030 para trasladarles su preocupación por “las vulneraciones de los derechos” de menores en Ceuta, “ante las imágenes y noticias de posibles devoluciones de niños y niñas”.
Así lo ha dado a conocer este viernes la plataforma de oenegés, que ha añadido que “los medios de comunicación están alertando de posibles devoluciones colectivas donde no se ha podido identificar a posibles menores edad, así como de posibles devoluciones en caliente de niños y niñas”.
“Las devoluciones de niños y niñas no son legales en nuestro ordenamiento jurídico y no pueden ser toleradas”, ha insistido Ricardo Ibarra, director de la Plataforma de Infancia, quien ha advertido que “la situación excepcional no puede amparar, de ningún modo, la realización de devoluciones en caliente de niños y niñas, contrarias al derecho internacional, tal y como ha dicho el Tribunal Constitucional”.
En este sentido, considera “importante que se investiguen estos casos, así como garantizar la puesta en marcha de los procedimientos oportunos”. Por esta razón, la Plataforma de Infancia se ha puesto en contacto con la Fiscalía para que tome en consideración estas informaciones, las investigue y actúe, si fuera necesario, para garantizar que no se realizan.
Como recuerda la ONG, el derecho internacional y el ordenamiento jurídico español establecen que se debe identificar adecuadamente a estos niños y niñas; especialmente a aquellos que viajan solos; protegerlos y asegurar su adecuada atención inmediata; así como realizar una valoración individualizada del interés superior de cada niño o niña con la finalidad de identificar posibles perfiles vulnerables, establecer cuál es la solución mejor para su situación individual y proporcionarles la intervención más adecuada, lo que requiere que sean escuchados.
Las organizaciones de infancia, a disposición de las autoridades
En este sentido, ha puesto de relieve que las organizaciones de infancia se han puesto a disposición de las autoridades para garantizar y realizar adecuadamente las valoraciones de interés superior del menor.
A su juicio, también es “fundamental” valorar una posible reagrupación familiar en el caso de que sea aconsejable, de acuerdo a su interés superior, tras la expresión de voluntad por parte del niño, la niña o el adolescente.
En este punto, ha aclarado que estos procesos requieren una adecuada valoración del riesgo; así como establecer contacto con las familias en origen y no debe llevarse a cabo cuando exista un ‘riesgo razonable’ de que este retorno pueda dar lugar a una violación de los derechos humanos del menor.
“En ningún caso se deberá hacer mediante la entrega de los niños, niñas o adolescentes a las autoridades marroquíes por suponer un riesgo claro de que queden finalmente desprotegidos o sufran cualquier tipo de vulneración de sus derechos”, ha añadido la organización.
La Plataforma de Infancia se ha puesto en contacto también con las comunidades autónomas para “solicitar su implicación en la búsqueda de soluciones colectivas”. “Es importante que las comunidades autónomas colaboren y participen solidariamente en esta decisión, así como que ofrezcan recursos y otras soluciones para el resto de niños y niñas que ahora mismo están en Ceuta, si fuera necesario”, ha concluido.
Por otro lado, ante el anuncio por parte del Gobierno de España de la agilización de los protocolos de repatriación de los niños y niñas marroquíes que han cruzado a Ceuta para reunirlos con sus familias en origen, Save the Children ha recordado que es esencial que estas reagrupaciones y retornos se hagan siguiendo una evaluación del interés superior de cada menor y no de manera automática. “Es esencial que antes de producirse la repatriación, las autoridades garanticen que es segura y adecuada para su desarrollo y sus derechos”, ha añadido.
La ONG ha insistido en que antes de que se adopte cualquier decisión es necesario realizar una valoración de cada caso, para considerar si el posible retorno asegura el bienestar y desarrollo del niño o niña. “Para ello, es necesario realizar una entrevista personalizada con cada niño y niña y no caben medidas sistemáticas ni la mera manifestación de la voluntad del menor, mantiene la organización”, ha subrayado.
Muchos niños, viviendo en la calle
La ONG ha indicado que algunos marroquíes que ya vivían en Ceuta están buscando a menores con los que mantienen relación familiar, como Zohra, que está buscando a su sobrino, de 16 años, que cruzó la frontera días atrás. Su hermana y parte de su familia viven en Marruecos y no han tenido noticias desde hace días: “Mi hermana está muy preocupada, quiere saber su hijo donde está, si está vivo o no”.
Ha señalado además que muchos niños, niñas y adolescentes que llegaron a Ceuta desde Marruecos en los últimos días están viviendo en la calle, quedando expuestos a una vulnerabilidad aún mayor. Es el caso de Riduan, de 14 años y procedente de la ciudad marroquí de Castillejos. Este chico ha cruzado solo la frontera hasta en dos ocasiones esta semana, la última de ellas a nado durante la noche.
“No quiero volver a Marruecos”, ha explicado este niño, según la ONG. “Entré solo, pero luego me encontré con los amigos del barrio. Quiero estudiar aquí en España. Quiero un futuro mejor y ayudar a mi familia”, ha agregado.