Objetivo: blindar la negociación judicial

Objetivo: blindar la negociación judicial

Gobierno y PP discurren por dos pistas paralelas: una, la campaña; otra, la negociación.

Sánchez es aplaudido mientras Feijóo bebe agua en el debate en el Senado de este martes.Europa Press News via Getty Images

La vida política española discurre por dos pistas paralelas. Y con el clásico bipartidismo como protagonista. Una, la de la campaña electoral, con el foco puesto en la economía y en las recetas que PSOE y PP plantean. La otra, la de la esperada renovación del Poder Judicial, que tiene a los negociadores de ambos partidos “encapsulados” y logrando avances “significativos”, tal y como ha informado El HuffPost. En este contexto se desarrolló el nuevo cara a cara de Sánchez y Feijóo en el Senado, donde recuperaron los papeles iniciales. El presidente hizo de presidente y el líder de la oposición, de la oposición.

Sánchez rectificó, moduló su tono contra Feijóo y se centró en las medidas que está tomando el Ejecutivo en materia económica. Previamente, el PP le había reclamado sosiego en las formas para no entorpecer unas negociaciones, la del Consejo General del Poder judicial y el Tribunal Constitucional, que ambas partes constatan que están encarriladas, aunque muestran cautela ante la fragilidad de las relaciones. Cabe recordar que hasta el lunes 10 los puentes estaban rotos y la interlocución era prácticamente nula.

La impresión común es que es “ahora o nunca”, como ya adelantó este diario. En el transcurso del debate en el Senado, un alto cargo del PP aseguró en conversación informal con periodistas que aún “no” se ha entrado en el detalle de los nombres porque antes han de concretar cuál debe ser “el perfil” de los mismos. Esto es, que no haya mácula política en exceso entre los elegidos y se entienda como “estos son los míos y estos los tuyos”. En el caso del PSOE, además, tendrían que ceder algún nombre a Unidas Podemos, cosa que en privado reconocen fuentes populares, aunque enfatizan, “con quienes negociamos nosotros es exclusivamente con Bolaños”.

En síntesis, no está siendo sencillo, pero los días se van sucediendo y se van salvando obstáculos. Así lo resumen desde el entorno de Feijóo: “Seguimos avanzando, pero hay escollos que complican ir más rápido. Lo importante en todo caso es si hay acuerdo o no y de momento estamos sentados en la mesa y sin visos de ruptura, que no es poco”. Extremo que también confirma el Ejecutivo, que como el PP evita poner una fecha límite. “Avanzamos”, rematan las fuentes consultadas.

A la espera de que haya fumata blanca en lo judicial, las espadas continúan en alto en todo lo demás. Principalmente en lo económico, la principal preocupación de los españoles, y en consecuencia la cuestión que puede provocar un mayor trasvase de votos entre los dos principales partidos. Y, pasadas unas horas del cara a cara en la Cámara Alta, en Moncloa interpretan que a Sánchez le viene bien este tipo de envites, una vez ha encontrado el tono y ha puesto el foco en los datos y en las medidas, trasladando a la opinión pública que el Gobierno actúa en estos momentos de crisis frente “a la nada” de Feijóo.

"Seguimos avanzando, pero hay escollos que complican ir más rápido. Lo importante en todo caso es si hay acuerdo o no y de momento estamos sentados en la mesa y sin visos de ruptura, que no es poco", dicen desde el entorno de Feijóo

Senadores de distinto color político, incluidos del PP, reconocen que Sánchez acertó al evitar el choque directo, bronco, con Feijóo. Aunque los populares lo entendieron como una “enmienda” a su actitud en el anterior debate. A partir de ahí, en Génova no entienden la satisfacción de Moncloa cuando “la base” económica de sus Presupuestos no se sostiene. Y es por ahí por donde tratan de erosionar la credibilidad de Sánchez: “Vive en una realidad paralela y dibuja una España casi idílica que no encaja con la realidad”, según las fuentes consultadas, que citan a Funcas, al Banco de España o al BBVA para hablar de “previsiones falsas”.

“Sánchez estuvo mejor. Está cómodo en el debate parlamentario y eso se traslada. Además, está tomando medidas que ni nosotros criticamos porque entendemos que la gente lo está pasando mal, como lo de las calderas. Pero su problema es que las cuentas no se sostienen y, en economía, la gente se fía más del PP”, según la reflexión de un veterano senador popular.

Y esa es la gran batalla, la comparación de modelos, la del relato. En Moncloa aseguran que está calando ya que Sánchez trabaja por proteger a los más vulnerables y ven, en línea con el CIS, agotado el efecto Feijóo. En Génova replican que el resto de encuestas le dan como ganadores y que Feijóo representa la “seriedad” y “solvencia” que España necesitan.

MOSTRAR BIOGRAFíA

Corresponsal político de El HuffPost.