OFRECIDO POR YOIGO. Diana tardó seis meses en recuperarse de las secuelas del daño cerebral adquirido. Fue entonces cuando se replanteó su vida: terminó sus estudios de diseño gráfico y se puso al servicio de los demás. Ella ha creado un juego que se ha convertido en una de las mejores terapias para pacientes con daño cerebral adquirido, alzhéimer, párkinson o dislexia.