Nueve ideas para hacer el mejor regalo a los niños: tiempo
Una campaña de juguetes pone sobre la mesa el eterno debate: ¿pasamos suficiente tiempo con nuestros hijos?
Los pajes de los Reyes Magos llevan días, incluso semanas, echando horas extra... La mayor cota de ilusión y felicidad anual de los niños se concentra en estos días. La llegada de sus generosas majestades y de Papá Noel son acontecimientos importantísimos para ellos.
Pero también lo son para sus aliados, los padres. Carreras en busca de la muñeca de moda que se ha agotado, horas invertidas en las colas de las cajas de los grandes almacenes, llamadas desesperadas a familiares y amigos en busca del codiciado videojuego... Todo por ver la cara de alegría de los pequeños. Pero, ¿de verdad esos son los mejores regalos que pueden recibir?
Una de las marcas de juguetes más famosas de España ha decidido impulsar este año una especial campaña que nada tiene que ver con Nenucos, Nancys o los Pin y Pon que fabrican. Bajo el lema #juegaconellos, Famosa ha conseguido poner de nuevo sobre la mesa el eterno debate. ¿Dedicamos suficiente tiempo a los niños? ¿Sustituímos ese tiempo por regalos y otros bienes materiales comprando así su felicidad? ¿No es tan importante la cantidad como la calidad? Porque es verdad lo que dice el anuncio: "El tiempo pasa volando y, cuando nos queramos dar cuenta, ellos ya no querrán jugar".
Laura Baena, fundadora del Club de Malas Madres, tiene las cosas claras. "Los padres y madres de este país pasamos 2 horas y 4 minutos de media con nuestros hijos al día. Literalmente desaparecemos —como contábamos en nuestro vídeo Madres y Padres Desaparecidos—porque vivimos en una sociedad que no fomenta la natalidad, que no apoya la conciliación real y donde ser madre/padre y profesional parece una utopía o heroicidad. Nos han engañado con el famoso 'tiempo de calidad', cuando realmente lo que necesitamos todos y todas, ellos y nosotros, es tiempo para vivir mejor, para compatibilizar la vida familiar con la laboral".
EL PROBLEMA, EL TIEMPO
La psicóloga y colaboradora de la web MamiCenter, Yolanda Salvatierra, no puede estar más de acuerdo: "La falta de tiempo es uno de los males de nuestra sociedad. El estrés, las prisas, la presión laboral y las políticas de conciliación no permiten que ese tiempo deseado sea realmente de calidad porque no se utiliza para escuchar las necesidades de los niños y acompañar verdaderamente su crecimiento. Y no debemos olvidar que durante la infancia el juego es la herramienta natural de su aprendizaje".
Y del mismo modo que con los más pequeños, y aunque parezca objetivo inalcanzable, Salvatierra cree que, al menos, se debe intentar compartir tiempo con adolescentes. "Es una etapa en la que lo más importante son las relaciones entre iguales y el grupo de amigos toma mayor relevancia frente a la familia. Ante esa situación, muchos padres sienten que se les ha acabado el tiempo de compartir actividades con sus hijos. No hay que forzar situaciones sino que hay que encontrar aquellas en las que se pueda confluir".
Eso sí, la psicóloga advierte y pone el foco en uno de los errores más frecuentes que suelen cometer los padres hoy y que también condiciona el tiempo que pasamos con los pequeños y en la preparación de los regalos:la sobrevaloración de la infancia y la aparición de los denominados padres helicópteros, esos que siempre dan vueltas sobre sus hijos, sofocando sus necesidades y miedos. "Actualmente se está sobrevalorando la infancia y son muchos los padres que se convierten en verdaderos niños, implicándose en cualquiera de las actividades infantiles. Solo hay que echar un vistazo a las redes sociales para comprobar la intervención de los padres en las tareas escolares y en las actividades extraescolares, así como el gran interés que hay por el ocio infantil y la compra de juguetes y artículos infantiles. Yo sí creo que los padres actuales juegan con sus hijos, aunque me atrevería a decir que son quizás los hijos los que juegan con los padres, ya que muchas veces los juguetes que se eligen no suelen corresponder a las necesidades de los niños".
Baena lo confirma también: "La falta de tiempo, la sobreinformacion y la presión social por educar más y mejor nos lleva a veces a sobreproteger y en ese momento es cuando aparecen los 'padres helicópteros'. Yo me niego a sobrevolar sobre mis hijas. Quiero educarlas en la autonomía, pero sobre todo en la igualdad y en la corresponsabilidad. No es fácil educar, cada día nos equivocamos, dudamos, nos contradecimos, pero ser madres/padres imperfectos es lo mejor que podemos hacer para darles a ellos la oportunidad de equivocarse y NO PASA NADA. En definitiva, normalizar la maternidad, desmitificarla es algo que nos ayuda a mejorar".
9 MOMENTOS QUE REGALAR
Noelia López-Cheda, autora del libroNo seas la agenda de tus hijos y prepáralos para la vida,lo tiene claro: "Es necesario pasar tiempo con ellos pero también es verdad que es necesario que sea de calidad. Muchas veces estamos con ellos pero no 'estamos presentes' sino a nuestras cosas, no escuchamos, no compartimos, es todo rutina. Por lo que si al final es menos tiempo pero de más calidad, sin duda, vale más. En mi caso es esto último. Paso poco tiempo pero siempre intento que sea 'del bueno'. Corto trabajo cuando estoy con ellos, móvil, redes sociales... Hacemos juegos, los escucho, tenemos conversaciones muy interesantes... Como ves, depende del caso, pero siempre 'estar' aunque sea poco."
Las vacaciones de Navidad son la época ideal para hacerles uno de los mejores regalos: estar. Además, para ello no hace falta esperar grandes filas, ni 'pegarse' con otros padres, ni recorrer una docena de tiendas en su busca.
Aquí proponemos algunos de los que nos han sugerido las tres expertas consultadas.
1. Hacer una excursión a algún paraje natural
Aprovecha un día soleado para salir al campo... Cada vez son más las voces que alertan sobre la necesidad física y psicológica que tienen los niños de disfrutar de la naturaleza. Así, matas dos pájaros de un tiro.
2. Organizar una cena especial, como las que solemos hacer los grupos de amigos
Elige un día de la semana y planea con los niños una cena especial con su plato favorito o con un menú temático. Preparar la comida y poner la mesa puede ser un divertido trabajo en grupo.
3. Tarde de juegos de mesa
Podéis elegir uno tradicional, como el parchís o el Monopoly; uno de mayor dificultad, como un puzle; y por qué no, un videojuego.
4. Tarde de paseo navideño y merienda de chocolate con churros
La Navidad es un gran momento para disfrutar de la ciudad o el barrio en el que vives pues las luces y los adornos alegran el paseo. A la vuelta, nada mejor que un chocolate con churros para entrar en calor.
5. Deporte en familia
El deporte es fundamental en la vida de los niños y practicarlo juntos es un buen ejemplo. Baloncesto, tenis, natación... las posibilidades son infinitas.
6. Visitar una exposición
De pintura, de ciencias o de fotografía... Despertar su curiosidad por lo que están viendo es el reto. Pero si se consigue, todos lo disfrutan de lo lindo.
7. Jornada de manualidades para hacer adornos navideños
Este año los adornos se hacen en casa y, además, con cosas recicladas o recogidas en la naturaleza, para potenciar el sentimiento ecologista.
8. A patinar en familia
Da lo mismo si ninguno lo habéis hecho nunca... ¡Es hora de aprender! No cabe duda de que os divertiréis entre caídas, piruetas y triunfos.
9. Tarde —o mañana— de cine.
En Navidad la cartelera se llena de estrenos infantiles... Películas destinadas a los niños pero que los padres disfrutan de la misma manera...
Ahora bien, puntualiza Laura: "Los Reyes son una de los momentos más mágicos del año para un niño. Por supuesto con sentido común, como todo en esta vida. Yo limito el número de regalos al espacio de mi casa y a la economía familiar... Tan fácil como eso. NO CABEN tantas cosas y no necesitamos tanto para ser felices. Y muy importante: siempre mejor juguetes sin pilas de los que no causen dolor de cabeza a los dos minutos. Las buenashijas han puesto 6 regalos cada una en sus cartas y luego Los Reyes Magos elegirán".