Ni diseño ni tecnología: la delicada situación de Bang & Olufsen
“No vendemos lo suficiente, tenemos un problema comercial”.
El año 2019 no ha sido bueno para una de las compañías tecnológicas más importantes del mundo del sector de la innovación y el lujo. La danesa Bang & Olufsen advierte una vez más de que sus resultados no serán tan buenos como lo esperaban. Un advertencia —profit warning– lanzada en el último mes del año que se suma a la que la empresa hizo en verano, tras tres anuncios de menores ganancias en 2018. “No vendemos lo suficiente, tenemos un problema comercial”, declaraba el presidente de la compañía, Ole Andersen, quien ha subrayado que “las campanas de advertencia” comenzaban a sonar de forma recurrente y la junta escucharía si un comprador se le acercara en éstos momentos.
Fundada en 1925, B&O asentó su éxito inicial en tecnología de audio innovadora, pero se ha visto afectada por el débil gasto de los consumidores en Europa y también por el lento progreso en su plan de recuperación. Los televisores son reconocidos por su diseño elegante y su innovadora tecnología de audio, pero no han logrado mantener la paz con los productos de compañías expertas en tecnología como Samsung cuando se trata de aplicaciones digitales.
B&O lleva meses en el candelero de la rumorología de compras. Su principal accionista es Qi Jianhong, que posee algo menos del 15% a través de sus empresas Sparkle Roll. Esta compañía quiso hacerse con el control de B&O hace unos meses y la Junta de Accionistas rechazó la operación. Las ventas de los equipos de música más modernistas y lujosos del mercado han caído en el último trimestre un 31%.
Desde la dirección financiera se ha explicado a los analistas que “estamos en una crisis comercial, no vendemos lo suficiente de nuestros productos y la razón por la que no tenemos éxito con las ventas y el marketing hay que verla desde una variedad de perspectivas”. Se espera que en abril la empresa presente su nuevo plan de negocio para el 2020- 2023.