Militares, guardias y curas bailan una conga con el 'Que viva España' en Lourdes

La Asociación Unificada de de Guardias Civiles (AUGC) ha difundido esta tarde en Twitter un vídeo absolutamente extravagante: el de un grupo de agentes de la Benemérita y militares de diversa graduación y curas españoles -salpicados por algún gendarme francés-, bailando la conga al ritmo del pasodoble Que viva España.

Según indican en su publicación, estas animadas imágenes fueron grabadas en la tradicional peregrinación de primavera al santuario de Lourdes (Francia), que este año se ha desarrollado entre el 18 y el 22 de mayo pasado. En ellas se ve a mujeres guardias bailando con sacerdotes y una conga multicolor, en la que se ven uniformes variados y varias sotanas, además de otros peregrinos, muchos luciendo banderas de España.

Los participantes integraban la 59ª Peregrinación Militar Internacional a Lourdes, sufragada con fondos públicos para los participantes españoles, según la AUGC, que denuncia que "mientras hay agentes sin chalecos antibalas".

Por parte del Instituto Armado han viajado hasta el santuario galo 12 miembros de la Guardia Civil de las escalas de oficiales, suboficiales, cabos y guardias y un capellán. La romería del año pasado supuso un desembolso de casi 11.000 euros de dinero público, según esta entidad, aunque los gastos de este año aún no han trascendido. Se convocó con carácter de "comisión de servicio indemnizable" y con motivación "religiosa", con todos los gastos pagados. En esta ocasión, de nuevo, ha sido coordinada por el Arzobispado Castrense a través del delegado de Peregrinaciones Militares.

"DISPENDIO AJENO A SUS FUNCIONES"

Ya el pasado abril, antes de conocerse este impagable testimonio gráfico, la AUGC denunció el viaje a Lourdes, "un dispendio ajeno a la función de la Guardia Civil", generado además "por una actividad impropia de un cuerpo policial de un estado democrático y aconfesional", según dijo en un comunicado.

"Estos alegres gastos tienen lugar, recordemos, en un cuerpo policial que continúa sin proveer a sus trabajadores de unos medios adecuados para llevar a cabo su trabajo. Que deben patrullar, por citar un ejemplo, en vehículos con más de 400.000 kilómetros, o costearse ellos mismos las mínimas reformas que sus viviendas requieren, eso si tienen la suerte de acceder a una. O que deben llevar a cabo sus tareas en oficinas destartaladas", añade la asociación.