Mariano Rajoy, a la Generalitat: "Renuncien de una vez a esta escalada de radicalidad y desobediencia"
El presidente del Gobierno ha acusado al Govern de "querer cambiar la Constitución y el Estatuto por la puerta de atrás".
Mariano Rajoy ha hecho este miércoles una declaración institucional sobre los sucesos de este miércoles en Cataluña, tras la detención de 14 personas relacionadas con la organización del referéndum del 1 de octubre. Su mensaje a la Generalitat: "Cesen en sus actuaciones ilegales, abandonen sus propósitos. Saben que este referéndum ya no se puede celebrar. Nunca fue legal ni legítimo".
"España es un estado democrático y de derecho. Tiene, como se ha podido comprobar hoy, los mecanismos para hacer cumplir la legalidad y exigir responsabilidades a quienes no la cumplen y a quienes están poniendo en peligro en la convivencia", ha dicho el presidente al comienzo de su alocución.
"Las leyes", ha proseguido, "no son una imposición arbitraria de un poder ajeno a la gente", ha dicho el presidente. "Son las normas que nos hemos dado para vivir en libertad y para administrar nuestras diferencias de manera justa. Por eso, nadie puede situarse por encima de ellas. Por eso, la desobediencia es un ataque a la convivencia".
"Se aspira", ha dicho en referencia a los propósitos de quienes quieren celebrar el referéndum, "a derogar la Constitución Española y el propio Estatuto por la puerta de atrás, sin tener los votos necesarios para hacerlo".
Rajoy ha aseverado que lo que "está en juego no es una demanda política. Está en juego el fundamento de nuestra Democracia. Cada ilegalidad tendrá su respuesta de manera firme, proporcional y rigurosa". Ha incidido en que el Estado "ha hecho cumplir la ley y seguirá haciéndolo" y ha enviado palabras de agradecimiento a todos aquellos funcionarios que se mantienen del lado de la legalidad.
A partir de ese momento, el presidente del Gobierno ha endurecido el tono para apelar directamente a los organizadores del referéndum del 1-O: "A los responsables de la Generalitat, les reclamo que cesen en sus actuaciones ilegales, que abandonen sus propósitos. Saben que este referéndum ya no se puede celebrar. Nunca fue legal ni legítimo. Ahora no es más que una quimera imposible. O lo que es peor: la excusa que algunos parecen buscar para ahondar más en la fractura que algunos han provocado en la sociedad catalana".
"No sigan adelante, regresen a la ley y la democracia y permitan que la gente pueda pasar página de estos días tan aciagos", ha argumentado Rajoy, quien ha insistido: "Si les importa Cataluña renuncien de una vez a esta escalada de radicalidad y desobediencia. Están a tiempo de evitar males mayores. A nadie beneficia esta tensión y este clima de reto a la ley".
Tras la dureza, el ofrecimiento de diálogo: "En democracia siempre hay cauces para defender cualquier posición política. En su día invité al señor Puigdemont a exponer sus demandas ante el Congreso de los Diputados; también, a participar en las negociaciones para la reforma de la financiación autonómica y permanentemente he estado dispuesto a buscar soluciones a los problemas de la Generalitat"
"Siempre he mostrado", ha asegurado Rajoy, "mi disposición a escuchar y a dialogar desde el respeto a la Ley y la lealtad a nuestro Estado de Derecho. En ese marco mantenemos nuestra disposición de siempre".
El presidente del Gobierno ha cerrado su declaración con una aseveración sobre sus actuaciones futuras: es aseguro que mi actuación estará guiada, en todo momento, por la prudencia y por la responsabilidad, para evitar que la sinrazón de unos pocos la tengan que sufrir el conjunto de los ciudadanos de Cataluña o el resto de los españoles".