A las diez (de la noche), en casa. Madrid ha endurecido sus medidas contra el coronavirus ante el aumento sin control de casos en toda la región y en el país. Desde el próximo lunes 25 y hasta el 8 de febrero estarán prohibidas las reuniones de personas no convivientes en casas y se adelantará el toque de queda a las 22:00 horas, una antes del horario actual.
El consejero de Sanidad, Enrique Ruiz Escudero, ha anunciado también la limitación de las reuniones sociales a un máximo de cuatro personas, junto al cierre de la hostelería a las 21:00. En estos establecimientos estará prohibido el servicio en barra, mientras que las terrazas quedarán reducidas a un 75% de su capacidad.
No serán los únicos espacios que se verán afectados en sus aforos. Los locales de ocio en centros comerciales no podrán albergar más de un 50%, mientras que teatros, cines y otras instalaciones culturales podrán contar con un 75% de su capacidad máxima. Las salas polivalentes (como el WiZink Center) se limitan a un 40%.
Excepciones a las nuevas medidas
Las limitaciones de reuniones en domicilios y espacios privados tienen excepciones por “cuidado de personas mayores, dependientes o especialmente vulnerables”, ha matizado Ruiz Escudero.
Del mismo modo, hay exenciones para el cierre de locales. Aquellos que podrán seguir abiertos en horario nocturno serán “farmacias, establecimientos médicos, veterinarios y gasolineras”, así como todos los que presten “servicios imprescindibles e inaplazables”.
En su intervención ha advertido de que las infracciones por incumplimiento están entre los 600 y los 600.000 euros y ha pedido la colaboración “activa” de la Delegación del Gobierno y de las policías municipales para el control de estas medidas.
Estamos en un nuevo escenario que implica nuevas reglas de juego
“Estamos en un nuevo escenario que implica nuevas reglas de juego”, ha apuntado tras señalar un incremento de casos semanal del 18%, por lo que la incidencia en la región está ya en 874 positivos por cada 100.000 habitantes, citando datos propios.
El consejero de Díaz Ayuso no ha perdido aquí la oportunidad para puntualizar que otras comunidades están peor (seis superan ampliamente el millar de casos de media). Y, tocaba, incidir en “Barajas”: “Al Gobierno parece no preocuparle la cepa británica, pero a nosotros, mucho”.
El responsable de Sanidad ha hecho hincapié a lo largo de su intervención en la necesidad de “quedarse en casa” e impulsar el teletrabajo en aquellas empresas que puedan organizarse a distancia.
Yolanda Fuentes, exdirectora de Salud de Madrid: "Buena suerte".