Los 11 faros más impresionantes de España
Una selección de los más icónicos del país, que podrás visitar durante todo el año.
Un faro es una torre de señalización, un salvavidas para muchos marineros. Pero también puede ser un lugar increíble para conocer en familia, en pareja o con amigos.
Estas torres son lugares de encuentro entre la historia y la modernidad donde se contemplan vistas increíbles e imborrables. Quizás muchos ya hayan planificado las vacaciones, pero tras ver estas fotografías seleccionadas por Hundredrooms, seguramente empiecen a pensar en organizar una nueva escapada.
La Torre de Hércules está situada en Punta Herminia, en A Coruña. Es el faro más antiguo todavía en uso del mundo. Fue declarado Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO en 2009 por su belleza y por ser un monumento excepcional.
En el año 2016, la torre recibió el mayor número de visitantes de los últimos años, aunque no se espera un descenso de la cifra, ya que para este mes de agosto las reservas están al 80%. Se espera que el tipo de viajeros que lo visiten sean, un año más, las familias jóvenes que buscan ocio y tranquilidad.
Se encuentra en Lugo, a la entrada de la Ría de Ribadeo. La mayoría de los visitantes prefieren verlo al atardecer puesto que la luz es impactante y permite fotografías únicas. Para los meses de verano la ocupación llega al 100% en este entorno excepcional.
El faro está unido a la península por un pequeño puente. El primer edificio es un faro de planta cuadrada, de fachadas blancas y con una linterna en el centro que en la antigüedad se iluminaba mediante una lámpara de aceite de oliva. El faro de Isla Pancha estuvo operativo durante 123 años, desde 1860 hasta 1983.
Este faro está situado al extremo norte de la isla, a 17 kilómetros de Maó. Fue inaugurado en 1922. La torre mide 28 metros de altura y en su interior se encuentra una completa exposición de señales marítimas.
Durante todo el año se puede visitar este faro, siempre que haya hueco, ya que en agosto las reservas superan el 90%. Durante décadas, ha sido visitado por familias, jóvenes y grupos que lo han convertido en el más fotografiado del país.
Este faro tiene una planta en forma de U con tres espectaculares torres. Una de ellas posee una cúpula acristalada que también sirve para orientar aviones.
Cerca de este faro se pueden encontrar hostales, albergues, habitaciones, casas rurales, pensiones, con precios bastante accesibles para que familias y viajeros intrépidos puedan disfrutar tanto del entorno como de las playas cercanas.
Actualmente, alberga el Museo de la Pesca Tradicional. Los visitantes pueden acceder a las torres para contemplar las preciosas vistas.
Para conocer este lugar existen alojamientos a menos de cinco kilómetros. Muchos residentes opinan que desde ese faro se ven los mejores atardeceres de la isla.
Este faro fue declarado de interés cultural en 2002. Es un lugar de peregrinación para los amantes del buceo, además de tratarse de un lugar con mucha historia. Allí se situaba un importante templo dedicado al dios romano Saturno y posteriormente hubo una torre de defensa contra los piratas otomanos.
El edificio tiene unos 50 metros de alto, con unas espectaculares vistas del mar Mediterráneo. Quienes deseen visitarlo pueden alojarse a partir de 120 euros por dos noches en apartamentos o casas vacacionales cercanas.
Este faro, uno de los más bonitos de Cádiz, empezó a utilizarse en 1990 tras su restauración. Ha sido declarado bien de interés cultural. Está situado sobre el cabo de Gracia, entre la playa de los Alemanes y la de El Cañuelo.
La bahía de Cádiz es el segundo punto de Andalucía que más pernoctaciones concentra y las visitas al Faro Camarinal son imperdibles para los turistas. Cádiz sigue creciendo cada año, reforzando no solo la economía de la zona y su posición de destino turístico de sol y playa, sino también familiar, cultural o deportivo.
El faro de cabo Machichaco o Matxitxako se encuentra a 122 metros sobre el nivel del mar. Se construyó en 1852, pero el edificio que se usa actualmente data de 1909 y se hizo con una torre de 22 metros de altura.
Además de ser un lugar indescriptible, resulta especial porque durante casi 10 años fue utilizado como una escuela de fareros o torreros. Cerca del faro existen alojamientos, casas de vacaciones, muchas de ellas adaptadas, con buenas puntuaciones online y precios accesibles por noche.
El faro fue inaugurado en 1853 y la conjunción con el Castillo de Santa Ana lo convierten uno de los lugares más visitados de toda España. Dentro del edificio se pueden visitar exposiciones con interesantes historias. Este faro sirvió como defensa de la villa, utilizado para huir antes de los ataques de la villa. Se puede visitar por la mañana o por la tarde.
Si bien las reservas de alojamientos cercanos a la zona están al 90% en los meses de verano, una buena alternativa es visitarlo a partir de mediados de septiembre, donde la disponibilidad baja al 50% en alojamientos, casas y albergues.
Es el faro más emblemático de Mallorca, situado a 201 metros sobre el nivel del mar. Para llegar a la cima, los visitantes pasean por acantilados, barrancos y calas, rodeados de impactantes curvas. Solo en días despejados es posible ver Menorca desde el Faro de Formentor, allá donde parece que se acaba la tierra.
Para el año 2018, el Consell de Mallorca y el ayuntamiento de Pollença prohibirán el acceso de vehículos particulares, por lo que solo será posible acceder al tramo final de la península de Formentor mediante autobuses lanzadera que partirán desde la futura estación del Port de Pollença.
Este faro fue edificado para advertir a los barcos de la presencia de la Laja del Cabo, un arrecife que ha sido la causa de muchos naufragios. La situación del Faro de Cabo de Gata fue un importante punto de referencia para navegantes ya en época de fenicios y griegos.
Este lugar tan emblemático y pintoresco recibe miles de visitas todos los años y, cada atardecer, reúne a cientos de turistas que acuden para contemplar las puestas de sol más impactantes.