Todo lo que se sabe sobre Amir Nasr-Azadani, el futbolista iraní condenado a muerte

El mundo del fútbol puso este domingo sus ojos en la final del Mundial que enfrentó en Qatar a Francia y Argentina. La selección albiceleste, liderada por Messi, venció en la tanda de penaltis a los franceses tras un vibrante partido que acabó 3-3. De esta manera, el considerado mejor jugador de la historia culminaba su carrera futbolística con el título más preciado para cualquier jugador.

Pero frente a la pomposidad y el show de una gran final del Mundial, el deporte sigue con mucha atención las noticias que llegan sobre Irán de Amir Nasr-Azadani, el joven futbolista condenado a muerte por el régimen del país acusado de participar en el asesinato de tres agentes de seguridad en el marco de las protestas por la muerte de Mahsa Amini.

Aunque ni la FIFA ni los presentes en Qatar este domingo hicieron alusión alguna a la grave situación de este “compañero”, importantes celebridades han alzado su voz para protestar por la brutal forma con la que la élite futbolística está ignorando lo que está pasando en torno a Amir Nasr-Azadani. ”¿Nos vamos a quedar con los brazos cruzados y mirando hacia otro lado? No se puede aceptar algo así, de ninguna manera. Todos con Amir Nasr-Azadani y con todas las personas que pasan y han pasado por algo así. BASTA. STOP”, escribía el futbolista Marc Bartra hace unos días.

Shakira, que se negó hace un mes a viajar a Qatar para participar en la ceremonia de inauguración del mundial en protesta por el autoritarismo en este país, también ha recordado al mundo la situación del jugador iraní. “Hoy [por este domingo] en la final de la Copa del Mundo, solo espero que los jugadores en el campo y el mundo entero recuerden que hay un hombre y compañero de fútbol llamado Amir Nasr, en el corredor de la muerte, solo por hablar a favor de los derechos de las mujeres”, decía la artista en un tuit. Su petición cayó en saco roto.

En El HuffPost repasamos todo lo que se sabe hasta ahora sobre la situación de Amir Nasr-Azadani.

- ¿Por qué ha sido condenado?

El futbolista de 26 años fue acusado por el régimen iraní de un delito llamado ‘moharebeh’, es decir, ‘enemistad u odio contra Dios’ por su supuesta participación en el asesinato de tres agentes de seguridad el 16 de noviembre en la ciudad de Isfahán. Este cargo conlleva, bajo la ley de la República Islámica, la ejecución en la horca.

- ¿Qué dice su familia?

El entorno del jugador niega que Amir esté implicado en los hechos que se le imputan y defienden que ha sido condenado por  apoyar las protestas en favor de los derechos de las mujeres que se suceden en el país tras la muerte en verano de Mahsa Amini.

Uno de sus familiares asegura que fueron amenazados por las fuerzas de seguridad en los días posteriores a su detención de que si “revelaban la noticia de su arresto”, se le impondría la sentencia más severa posible.

- ¿Qué le queda a Amir Nasr-Azadani para evitar la ejecución de la condena?

Según las leyes islámicas vigentes en Irán, cualquier acusado tiene derecho a apelar su condena a muerte en un plazo de 20 días después de recibir la sentencia, que luego debería ser revisada por el Tribunal Supremo. Sin embargo, esto no siempre se cumple. Majid Reza Rahnavard, de 23 años, murió ahorcado la semana pasada en una grúa en plena calle en Mashad, a unos 900 kilómetros al este de Teherán, en la que ha sido la primera ejecución en público de un manifestante detenido en las actuales protestas.

El joven fue ejecutado sólo 23 días de su arresto tras ser acusado de haber matado a puñaladas a dos miembros de la milicia paramilitar Basij y bajo el cargo de “enemistad con Dios”, al igual que Amir. Fue condenado y antes de cumplirse los veinte días, acabó ahorcado.

Amir Nasr-Azadani no ha podido escoger su defensa, según ha expresado su familia. Su defensor fue seleccionado de forma arbitraria por el sistema de justicia, tal como sucede con la mayoría de prisioneros condenados a la pena capital.

- ¿Cuántos condenados hay actualmente?

Al menos 20 personas estarían a punto de ser ejecutadas tras el origen de las protestas en el país, aunque la justicia iraní solo reconoce que ha sentenciado a 11 personas a muerte. Dos de ellos ya han sido ejecutados públicamente: Mohsen Shekari y Majidreza Rahnavard, ambos de 23 años.

Las fuerzas de seguridad iraníes también han acabado con la vida de al menos a 44 menores desde el inicio de las protestas, denuncia la organización Amnistía Internacional, y ha sometido a las familias de estos menores muertos a “fuertes presiones” para que guarden silencio.

En al menos 13 casos, los allegados tuvieron que firmar documentos o hacer declaraciones grabadas en vídeo, exculpando a las fuerzas de seguridad de su responsabilidad en la muerte de los menores.