Lo que debes hacer para dejar el pasado atrás
Muchas personas se conforman con enterrar sus sentimientos sin ser conscientes de que así solamente consiguen arrastrarlos.
A nadie le gusta el sabor del fracaso. La mente humana está programada para evitar el dolor y, cuando algo le duele, busca por instinto volver a estar bien lo antes posible.
Una de las consecuencias es que la gente no afronta el fracaso. Muchas personas se conforman con enterrar sus sentimientos sin ser conscientes de que así solamente consiguen arrastrarlos hasta su presente y futuro.
Aprender a dejar el pasado atrás es necesario para estar preparados para los fracasos del futuro.
"Una de las formas de levantarnos tras un fracaso es aprender la lección para seguir adelante, encontrar nuevas perspectivas y aceptar a la persona que somos (y no a la que creíamos que íbamos a ser)", explica Cassie Mendoza-Jones al HuffPost Australia.
Mendoza-Jones, experta en coaching empresarial y conferencista motivacional, acaba de publicar su segunda obra, It's All Good, una guía práctica para aprender a aceptar quién eres cuando atraviesas un periodo complicado. Ella recomienda poner en práctica los siguientes consejos para aprender a dejar el pasado atrás.
No pasa nada por cambiar de opinión
"¿Sabías que no está prohibido cambiar de opinión? Tras un fracaso, cuando atraviesas momentos difíciles, o cuando te aferras a viejas creencias sobre ti mismo que posiblemente te lastren, tienes la ocasión de cambiar tu forma de pensar", apunta.
Al igual que tomas decisiones sobre qué comer o qué ropa ponerte, también es tu decisión cómo afrontar el dolor y el fracaso, siendo amable contigo mismo o de forma demasiado crítica.
"Eres tú quien decide en qué invertir tu tiempo, energía, atención y con quién. Del mismo modo, también es decisión tuya cuándo hacer borrón y cuenta nueva y cuándo pararte a pensar en las veces en que las cosas no han salido bien. Todo ello es necesario para convertirte en la persona que eres a día de hoy", añade la experta. "Puedes decidir sobre todos tus asuntos. ¿Qué es lo que tienes que dejar atrás? ¿Hacia dónde te tienes que orientar? ¿En qué necesitas centrarte más? Incluso cosas como ¿me tomo otro café?".
Deja de pensar tanto en el futuro
A veces, las personas intentan evitar los obstáculos antes incluso de que aparezcan, creyendo que así van a poder evitar el sufrimiento que les provocaría si no lo hicieran.
"Para ser la mejor versión de nosotros mismos (fracasos, retos, virtudes y defectos), debemos vivir en el presente", aconseja Mendoza-Jones.
"Sé lo que es dar demasiadas vueltas al futuro; sé que cuando estamos nerviosos, pensamos en el futuro creyendo que así solucionaremos un problema que ni siquiera ha surgido aún. Sin embargo, yo al final me di cuenta de que así solo derrochaba mi energía. En lugar de eso, es mejor emplear tu energía en el momento presente y mantener los pies en la tierra. Solo así puedes desarrollarte, levantarte y ser tu mejor versión", asegura.
Sé comprensivo contigo mismo
Consiste en mirar a tu pasado, concretamente a tu fracaso, y ser consciente de que avanzas no a pesar de ello, sino gracias a ello.
"Personalmente, solía ser muy dura conmigo misma cuando consideraba que había fracasado, o cuando me ponía metas altísimas que, en realidad, ni siquiera importaban. Machacándome a mí misma por mis errores, vivía en el pasado, atascada en una maraña de remordimientos, dolor, rabia, indignación y vergüenza", reconoce la experta.
Si estás ahora mismo martirizándote por un fracaso, Cassie Mendoza-Jones considera que lo primero que debes hacer es quitarte de inmediato la presión de encima: "Si hubieras podido hacer algo de forma distinta, lo habrías hecho, de modo que sé comprensivo contigo mismo cuando vuelvas la vista al pasado y, si vuelves a caer, sé comprensivo también".
"Que no te asusten tus fracasos, los momentos complicados o tus creencias anteriores. En vez de eso, mira los retos de frente, aprende de las lecciones que te dé la vida, que son necesarias para tu desarrollo personal, y sal adelante", recomienda. "Eres lo suficientemente fuerte para superar (de una forma u otra) los desafíos que se te pongan por delante. Solo tienes que confiar en ti mismo".
Eres nada más y nada menos que lo que tienes que ser
"Aunque nunca hubieras pensado que fueras a acabar así, eres justo como se supone que deberías ser", sostiene Mendoza-Jones. "Las cosas suceden así porque sí y, si no suceden, tampoco pasa nada. Quedan muchas alegrías por descubrir cuando dejas de planificar tu vida al detalle. Te darás cuenta también del placer de dejarte llevar cuando te deshagas de tu forma de pensar cuadriculada sobre quién y cómo deberías ser".
La experta resume: "Vive aquí, ahora, en el presente, y respétate por ser quien eres. Solo desde ese punto de partida puedes salir adelante. Solo con esa mentalidad podrás dejarte llevar por el gran plan de tu vida".
Este artículo fue publicado originalmente en el 'HuffPost' Australia y ha sido traducido del inglés por Daniel Templeman Sauco.