'Le Monde' resume con una frase la actuación del Gobierno de España en las últimas semanas: más claro, imposible
Niega que todo esté bien aquí, como aseguran algunos.
El diario Le Monde, el más importante de Francia, ha publicado un extenso reportaje a desmentir mitos que circulan allí sobre la actuación que han tenido en otros países respecto al coronavirus.
El artículo se centra en un parte en el caso de España después de que el líder empresarial Silvano Trotta afirmarse que, al contrario que en Francia, en Madrid están abiertos los teatros, los museos, los restaurantes y las tiendas desde julio “y todo está bien”.
Le Monde explica cómo está España para poner en contexto esa afirmación y es categórico: “El gobierno español tomó la decisión de salvar la economía a toda costa” y no impuso unas normas generales. Así, subraya que, al contrario de lo que se hizo en Madrid durante la primera oleada, los restaurantes y bares no cerraron y han podido seguir trabajando durante todo el otoño “a pesar del repunte epidémico observado a finales de agosto”.
“A pesar de estas medidas, España ha experimentado un descenso del número de casos desde finales de octubre y una situación epidemiológica comparable a la de Francia, con 10.863 nuevos casos el 29 de noviembre, frente a casi el doble a principios de mes”, explica el periódico.
Le Monde matiza que sugerir que no hay restricciones en España es engañoso porque sí existen aunque varían dependiendo de la región. “Afirmar que todos los lugares han permanecido abiertos en Madrid es también una exageración”, avisa mientras recuerda que hay toque de queda y un protocolo sanitario que reduce sus aforos.
También se subraya que ha habido confinamientos perimetrales en varios distritos de la capital y que las cuarentenas domiciliarias en los casos de positivos son “más estrictas” que en Francia.
“En este contexto, una parte de la población se encuentra confinada y muchos bares y restaurantes han mantenido el telón bajado en pleno auge de la segunda ola, ya sea por motivos de salud o económicos. La vida cotidiana madrileña, por tanto, no es la de un regreso a la normalidad”, continúa explicando Le Monde.
Además, destaca que “desde el punto de vista de la salud pública, es difícil decir que todo está bien” porque “la segunda ola ya se ha cobrado más de 15.000 vidas en España (frente a las 28.000 de la primera)” y “con 942 muertes por cada 100 000 habitantes, el país tiene la quinta tasa de mortalidad más alta del mundo, solo por detrás de Bélgica, San Marino, Andorra y Perú”.
“En comparación, el 26 de noviembre de Francia está en el decimosexto lugar (755,6 muertes por cada 100 000 habitantes). Y si el pico de la segunda ola parece haberse alcanzado a fines de octubre-principios de noviembre, su lento declive preocupa por los riesgos de repunte durante las celebraciones de fin de año”, zanja.