El Gobierno canario acelera para adquirir casas donde acoger a parte de los evacuados, más de 6.000
Las autoridades ya no esperan que la lava llegue al mar en varios días. Los reyes se encuentran en el terreno, cuyos destrozos no dejan de crecer.
La lava del volcán de La Palma ha arrasado ya más de 220 hectáreas y destruido 350 inmuebles, según los últimos datos del sistema de observación terrestre europeo Copernicus. Y no se espera que el magma alcance el mar, al menos ni hoy ni mañana viernes. Ante la emergencia, el Gobierno canario ha acelerado el proceso de compra masiva de inmuebles para acoger a parte de los miles de evacuados.
Hay poca variación con respecto a anteriores balances. El volcán de Cumbre Vieja en La Palma mantiene los fenómenos explosivos, una velocidad estable en las deformaciones y una sismicidad de bajo nivel, como ha detallado en una rueda de prensa, la directora del Instituto Geográfico Nacional (IGN) en Canarias, María José Blanco.
Una colada de lava prácticamente se ha detenido—la orientada más al norte— y la otra avanza “muy lento”, a unos 4 metros por hora, algo que es normal cuando se alejan del centro de emisión, al tener que arrastrar el material previo, y adaptarse a la topografía del terreno. Según los cálculos de los técnicos, el frente de lava tiene unos 500 metros y en algunos tramos, una altura de 12 metros, y la columna de gases del volcán alcanza picos máximos de 4.500 metros de altitud.
Blanco también ha señalado que “no es esperable” que haya lluvia ácida debido a la acción de los alisios y que la calidad del aire es buena, y ha garantizado que, ante la lentitud de la lava, ni este jueves ni mañana viernes, llegará al mar.
El Instituto Volcanológico de Canarias, ha explicado que hay un “proceso de drenaje” en el interior del volcán, pero que este “no significa que a corto plazo la erupción vaya a finalizar, ni que el magma se esté agotando”.
Las mediciones, hechas a las 19.26 muestran cómo la lava ha cubierto 14 hectáreas más en 36 horas, cuando se hizo el cálculo anterior. Además, en el mismo lapso, ha destrozado 30 inmuebles más.
No obstante, el último informe del Departamento de Seguridad Nacional (DSN), emitido a las 8.00 de esta este jueves, ha reducido ligeramente esa estimación hasta las 150 hectáreas y los 300 inmuebles destruidos.
El Ejecutivo autonómico gestiona la compra de viviendas
El Gobierno de Canarias, a través de la Consejería de Obras Públicas, está gestionando la compra de 280 viviendas para alojar a las familias que han perdido sus casas por la erupción del volcán de La Palma.
De esa cantidad total, 257 viviendas son de nueva construcción, acabadas o a punto de terminarse, y las 23 restantes, de una nueva promoción que el Instituto Canario de Vivienda (ICAVI) está finalizando en el municipio de El Paso y que cederá para hacer frente a esta emergencia habitacional.
El consejero canario de Obras Públicas, Sebastián Franquis, señala en un comunicado que la empresa pública Visocan está realizando un análisis sobre el terreno para localizar y contactar con todos los propietarios de viviendas vacías que hay en la isla en estos momentos.
El objetivo es determinar qué puede comprarse y ponerse ya a disposición de los vecinos afectados, con el fin de lanzar un primer lote de algo más de un centenar de viviendas en el próximo octubre. Además, el personal de Visocan también ha localizado una docena más de promociones que sumarían al menos otras 150 viviendas que podrían estar disponibles para finales de año o principios de 2022.
Cómo reclamar indemnizaciones
El Consorcio de Compensación de seguros ha emitido una nota explicando cómo realizar los trámites para reclamar una indemnización ante el destrozo en viviendas y otras propiedades.
En caso de que haya daños en bienes o personas (algo que aún no ha ocurrido), el Consorcio ofrece un teléfono de contacto, el 900 222 665 y la web consorseguros.es.
La entidad recomienda, ante la más que probable destrucción de documentación por la lava, que cada titular contacte con su aseguradora para conocer los datos de las respectivas pólizas. Igualmente apunta que no hay un plazo límite para hacer las gestiones de reclamación.
Además, el Gobierno central ha creado un número de teléfono gratuito y una web para gestionar los daños de la erupción. Además, el ministro de Agricultura, Luis Planas, ha explicado que el Ejecutivo está evaluando los daños causados en el sector agrario por la erupción para “dar cobertura pública”.
El rastro de magma y material volcánico ha ralentizado algo su avance tras haber entrado en Todoque. Pero las autoridades muestran su preocupación por la minoración del ritmo, ya que supone la expansión del magma por el terreno en vez de llegar a la costa.
En las últimas horas, los vecinos de las zonas afectadas han podido pasar durante algunos minutos por sus casas para recoger sus pertenencias antes de que la lava engullera sus hogares. Este jueves se repetirá el proceso.
La guardia civil ha informado de casi 300 efectivos de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado están desplegados en la zona, además de personal de personal de la Dirección General de Tráfico y de protección civil, que también están desplegados en la zona.
Retrasos en los vuelos
El aeropuerto de La Palma se mantiene operativo pese a la erupción volcánica que afecta a la isla desde el pasado domingo, si bien han empezado los primeros retrasos que afectan a seis vuelos interinsulares con Tenerife y Gran Canaria.
La ceniza ya ha empezado a llegar por la zona del aeropuerto de Mazo, pero por ahora ni Aena ni Enaire, el gestor de navegación aérea en España, han activado ninguna restricción.
De hecho, este miércoles se operaron en Canarias un total de 679 vuelos y no hubo incidencias en La Palma, y para este jueves se prevén 48 operaciones con la isla.
Este jueves, la Delegación del Gobierno en Canarias ha pedido crear dos zonas restringidas de espacio aéreo para emergencias y fuerzas y cuerpos de seguridad. Aunque la medida no afectará a la aviación comercial, según ha precisado citando a Enaire.
Los reyes prometen “la ayuda de todos”
Felipe VI y Letizia han visitado este jueves La Palma, donde durante toda la jornada se han reunido con vecinos afectados por la erupción del volcán de Cumbre Vieja, además de participar en la reunión diaria del Comité Director del Plan Especial de Protección Civil y Atención de Emergencias por Riesgo Volcánico (PEVOLCA).
En un mensaje de esperanza ante los vecinos que han perdido “casi todo”, el monarca ha prometido la ayuda “de todos”. “Tenemos que hacer todo lo que esté en nuestras manos para sacar adelante a estas familias, preservar su seguridad, garantizar su mañana y reconstruir en La Palma todo lo que la naturaleza se ha llevado”, ha pedido, precisando que puede que no sea posible hacerlo en el mismo lugar.
“Todas estas familias, a pesar del desastre que les ha golpeado, van a tener un futuro porque entre todos vamos a ayudar a recomponer sus vidas”, ha destacado, sentenciando que “les tenemos que ayudar”.
Según Europa Press, este jueves se culminará, en principio, el realojo de los evacuados en complejos turísticos de la isla.
Propiedad del Estado
El terreno que la lava del volcán gane al mar será automáticamente dominio público marítimo terrestre, es decir, propiedad del Estado, mientras que las propiedades sepultadas en tierra firme por la colada magmática seguirán siendo privadas.
No obstante, el Estado está obligado a proteger este nuevo bien que forma parte del patrimonio geológico y por tanto sujeto a la Ley de Patrimonio Natural y la Biodiversidad, de modo que este podrá o no expropiar tales propiedades.
De acuerdo con la Ley de Costas, pertenecen al dominio público marítimo terrestre estatal los terrenos o islas que estén formadas o se formen por causas naturales en el mar territorial o en las aguas interiores de los ríos, hasta donde se hagan sensibles las mareas.
Por tanto, estos terrenos que previsiblemente ganará el dominio público marítimo terrestre serán inalienables, imprescriptibles e inembargables.
El experto vulcanólogo del Colegio de Geólogos, José Luis Barrera, ha explicado a Europa Press que los terrenos privados que queden debajo de la colada volcánica seguirán siendo de sus propietarios. “Solo será automáticamente del Estado el nuevo terreno que se genere si la lava llega al mar. Entonces ese terreno será de dominio público”, precisa.
El vulcanólogo va más allá y lamenta que la pérdida de casas, negocios, plantaciones y, en definitiva, de la vida diaria de muchos de los afectados podría haberse evitado, porque asegura que existen “documentos oficiales en el Cabildo” que afirman que la ladera de Cumbre Vieja, donde emana el volcán y no tanto en el este de la isla, hay riesgo evidente de erupción volcánica.
“Las administraciones podrían haber evitado que muchas personas se quedaran sin sus viviendas, sobre todo las construidas de 50 años para acá, porque se sabía que iba a salir el volcán”, denuncia