Las autoridades indonesias piden "perdón" por no activar la alerta de tsunami
Informaron de que era una marea creciente y pidieron calma a la población.
Al menos 222 personas han muerto y más de 800 han resultado heridas por el tsunami que ha azotado varias regiones de Indonesia tras la erupción del volcán Anak Krakatoa. Entre los afectados hay 28 desaparecidos.
Un tsunami que llegó a las costas indonesias sin que se activara alarma alguna, razón por la que las autoridades indonesias se han disculpado.
La erupción del volcán Anak Krakatoa —ubicado entre Java y Sumatra— a las 21:00 horas, hora local, provocó un corrimiento de tierra submarino que, junto a la marejada por la luna llena, creó un tsunami que sorprendió unos 25 minutos después a cientos de personas en las playas de la región.
La ausencia de un fuerte terremoto, fenómeno que sirve para activar el sistema de alarmas ante un posible tsunami, dejó silenciadas las sirenas mientras se aproximaban las olas gigantes, explican expertos de la Agencia Meteorológica, Climatológica y Geofísica de Indonesia (BMKG).
Según ha explicado Sutopo Purwo Nugroho, portavoz de la Agencia Nacional de Gestión de Desastres (BNPB), en un principio se indicó a la población que mantuviera la calma porque sólo se trataba de una marea creciente.
"Fue un error, lo sentimos", ha indicado Nugroho en su cuenta de Twitter, donde ha reconocido el fallo.
El tsunami ha afectado a varias zonas del estrecho de la Sonda, que separa las islas indonesas de Java y Sumatra, y sirve de enlace entre el mar de Java y el océano Índico.
Allí hay numerosas áreas turísticas, como precisamente una de las más afectadas, la playa de Tanjung Lesung, en la localidad de Pandeglang, donde al menos 250 empleados de la empresa estatal de servicios públicos PLN disfrutaban de un evento organizado por la compañía junto a sus familias.
Al menos 92 personas han muerto en esta playa, entre ellas siete asistentes al evento, según un portavoz de la empresa, que cifra en 89 el número de asistentes no localizados. Otros 35 fallecidos han sido confirmados en Lampung Sur. Todavía no hay una estimación general en cuanto al número de desaparecidos.
Las primeras informaciones sobre daños materiales detallan al menos 430 viviendas casi destruidas, nueve hoteles 'muy dañados' y decenas de embarcaciones afectadas, de acuerdo con el portavoz de la Agencia Nacional para la Gestión de Desastres, Sutopo Purwo Nugroho.
Las autoridades han advertido a los residentes y a los turistas que se encuentran en las zonas de costa a lo largo del estrecho que se mantengan lejos de las playas, ya que la alerta por tsunami y fuerte oleaje se mantendrá activa hasta el 25 de diciembre.
"Aquellos que han sido evacuados, por favor, no regresen todavía", ha hecho saber Rahmat Triyono, integrante de la Agencia de Meteorología, Climatología y Geofísica (BMKG).
Mientras, el presidente del país, Joko Widodo, ha ordenado a "todas las agencias gubernamentales relevantes que tomen medidas de respuesta de emergencia de inmediato, encuentren víctimas y atiendan a los heridos".
Esta tragedia es la última que sacude al país en un año cargado de infortunios. En agosto, múltiples terremotos dejaron más de 500 muertos en la isla turística de Lombok. En octubre, un seísmo y un posterior tsunami causaron más de 1.200 muertos en la isla de Célebes.