Las 5 teorías conspiranoicas que rodean al asesinato de Kennedy
Desde el papel del vicepresidente Johnson hasta la colaboración en el asesinato de la mafia...
La última colección inédita de archivos del Gobierno de EEUU sobre el asesinato de John F. Kennedy saldrá a la luz este jueves de forma parcial o total, y aunque los expertos no esperan ningún "bombazo", los documentos podrían arrojar luz sobre los acuerdos entre la CIA y México en la Guerra Fría.
Alrededor de 3.100 expedientes oficiales hasta ahora clasificados y custodiados por los Archivos Nacionales de Estados Unidos se publicarán este jueves si el presidente estadounidense, Donald Trump, no lo impide, según lo dictado por una ley aprobada en 1992.
Según la versión oficial, el exmarine Oswald disparó en ocho segundos tres veces, pero fueron dos los disparos que alcanzaron y mataron al presidente Kennedy. Sólo una hora después de perpetrar el ataque fue detenido. Oswald estaba fichado por los servicios de inteligencia, que sospechaban de sus pasos y había vivido en la Unión Soviética en plena Guerra Fría. Una vez capturado insistió en negar su responsabilidad en la muerte del presidente y, durante su traslado a prisión, el 24 de noviembre, fue asesinado a tiros por Jack Ruby, dueño de un club nocturno que supuestamente pretendía vengar a Kennedy.
La Comisión Warren, que investigó el asesinato, concluyó, tras examinar 3.154 pruebas y estudiar las declaraciones de 552 testigos, que Oswald estaba detrás del asesinato del por entonces líder de EEUU, que había actuado solo y que no formaba parte de ninguna trama comunista internacional. Pero esta versión nunca ha sido plenamente aceptada.
La inminente revelación tiene en vilo a historiadores y defensores de las teorías de la conspiración, pero la Casa Blanca ha insinuado que la publicación podría ser solo parcial: Trump podría bloquear la divulgación de algunos documentos considerados delicados por la CIA u otras ramas del Gobierno estadounidense.
Pero, ¿qué les asusta? ¿por qué no se publica la totalidad de los documentos sin matices? Los conspiranoicos llevan años publicando los motivos. Y aquí están resumidos.
1. Lee Harvey Oswald no actuó solo
El exmarine no pudo actuar en solitario. En teoría perpetró el ataque desde un pequeño edificio de ladrillo rojo ubicado en un extremo de Elm Street, en su desembocadura en la plaza Dealey. Desde una ventana en su sexto piso se supone que disparó, pero para los que no se creen la versión oficial, hay una pregunta básica: ¿Por qué no disparó cuando la limusina del presidente venía de frente y esperó a que que girara en la plaza disparando a más distancia y con un ángulo más difícil?
Es más, para reforzar esta teoría, aseguran que el ángulo de los disparos no cuadra con la autopsia, sino que hubo otros disparos desde el otro lado de la plaza, en la dirección en la que iba el descapotable de JFK.
2. Oswald fue una pieza de un plan internacional a gran escala
Oswald fue asesinado dos días después de matar al presidente por Jack Ruby, quien a su vez murió cuatro años más tarde. Se dice que Ruby acabó con Oswald para que no se supiera quién era el autor intelectual del magnicidio. Y en este contexto se habla de una gran trama a nivel internacional: la CIA, la KGB, el FBI y hasta el entonces vicepresidente de EEUU, Lyndon B. Johnson.
Los investigadores del asesinato creen que en los documentos todavía clasificados se muestra que tanto la CIA como el FBI habían seguido de cerca las actividades de Oswald en México (viajó allí dos meses antes del asesinato) y sabían que se había reunido con espías soviéticos y cubanos, así como las intenciones del exmarine y no hicieron nada para evitarlo. Esto da base también a los conspiranoicos, que apuestan a que la CIA va a impedir que se revelen los expedientes porque afirman que la Agencia entrenó y ordenó el asesinato a Lee Harvey Oswald, el único culpable del crimen.
3. El responsable fue el vicepresidente Johnson
Se ha especulado mucho, muchísimo, con que en el crimen estuvo involucrado el vicepresidente de Estados Unidos, Lyndon B. Johnson. En ello influye el hecho de que tenía en marcha investigaciones en su contra por prevaricación, lavado de dinero... y que casualmente todas fueron cerradas precisamente cuando alcanzó la presidencia. Hay más: se habla de una reunión secreta en la víspera del asesinato en la que participó el vicepresidente y en la que, aseguran, se planeó el ataque.
Roger Stone, un asesor cercano de Trump durante las elecciones aseguró en un libro de 2013 que Johnson fue el "cerebro" del ataque. En la misma línea está enmarcada la película de Oliver Stone, "JFK", que también sugiere la participación del entonces vicepresidente.
4. La mafia estuvo involucrada
A Kennedy siempre le acompañó el rumor de que alcanzó la presidencia con la ayuda de la mafia. Y después, esa ayuda le jugó una mala pasada: los que están a favor de esta hipótesis sentencian que el asesinato fue obra de la CIA y los servicios secretos militares, que utilizaron en la conspiración a la mafia y a Lee Harvey Oswald como chivo expiatorio.
5. ¿Qué pinta México?
Este punto, más que una teoría conspiranoica, es el más real, del que realmente este jueves puede saberse algo más.
Así lo defiende el juez federal John R. Tunheim, que entre 1994 y 1998 encabezó un comité independiente que examinó y publicó la gran mayoría de los documentos oficiales del Gobierno estadounidense sobre el asesinato. Entre los documentos, según el juez, puede haber detalles sobre "los acuerdos" que Estados Unidos tenía para compartir inteligencia con México poco antes del asesinato de Kennedy en 1963, cuando Oswald visitó las embajadas en la capital mexicana de Cuba y la Unión Soviética, sometidas a la vigilancia de Washington.
En 1998, "el Departamento de Estado y la CIA" convencieron al comité presidido por Tunheim de que no publicara "los detalles operativos de cómo compartían información de inteligencia con México" por temor a que eso "dañara" o incluso hiciera caer al Gobierno mexicano, afirmó el juez.
"Publicar cómo un Gobierno extranjero comparte inteligencia con la CIA puede ser controvertido, y creo que eso les preocupaba, porque el partido político que estaba en el poder en México en los años 1990 era el mismo que había" gobernado en 1963, ha añadido en referencia al Partido Revolucionario Institucional.