Es domingo por la noche, tienes hambre y acudes a un restaurante de comida rápida como McDonald's para saciar tus impulsos primarios.
Con las prisas y el hambre pagas y te vas sin recoger el ticket de compra. MAL. Un extrabajador de la compañía, que trabajó en la empresa durante un año en Londres, tiene una curiosa explicación.
Pedir el ticket es uno de los gestos que delata a los denominados clientes misteriosos que las empresas envían para evaluar el servicio y calidad de sus locales y franquicias, como recoge Mashed.
Si los empleados creen que eres uno de estos clientes misteriosos tienden a tratarte mejor. Esto quiere decir que la comida estará recién hecha y el trato será prioritario. Según este exmpleado, la mejor hora para hacerse pasar por misterioso es el mediodía.