La presidenta de los ricos

Isabel Díaz Ayuso no ve a los pobres, son invisibles para ella, igual que para su consejero Enrique Ossorio. Solo los ricos están en su radar y debe tener localizados a tantos que parte de los recursos de la Comunidad de Madrid se destinarán a defender que los millonarios madrileños no paguen impuestos, mientras el resto cumple con sus obligaciones para seguir financiando, entre otras cosas, que la presidenta puede mantener su cruzada por salvaguardar el patrimonio de los más acaudalados. Por eso ha anunciado que recurrirá ante el Tribunal Constitucional el impuesto a las grandes fortunas.

“Ella ha conseguido algo muy inspiracional, lograr que todo el mundo sienta que le afecta el impuesto de patrimonio, cuando no es cierto”, apunta un concejal de Más Madrid en la Asamblea. Solo afecta a alrededor de 500 multimillonarios —el 67% de los más ricos de España vive en la Comunidad de Madrid— que están exentos del impuesto de patrimonio y por lo tanto dejan de ingresar a las arcas de la región 900 millones de euros, necesarios para no tener que esperar más de un año para una cita o para una operación, o para ayudar a los desfavorecidos ‘invisibles’.

El éxito de Ayuso pasa por convencer a los 6,7 millones de madrileños de que con sus impuestos se costea mantener intacto el patrimonio de un puñado de ricos y que si la sanidad de Madrid se pone en huelga es porque no hay recursos para el sistema sanitario y porque esos empleados, los que aplaudía ella misma en la pandemia, son unos quejicas.

Ayuso prefiere a los ricos que se niegan a subir sueldos a sus empleados para que sus beneficios puedan seguir creciendo, aduciendo que estamos en crisis. No hay que olvidar que en 2021 los super ricos aumentaron un 12% en España mientras la desigualdad se disparaba. “El tiempo que los servicios jurídicos dedican a realizar la petición no lo dedican a resolver los múltiples recursos que tengan planteados los ciudadanos. Indudablemente es la presidenta de los ricos, porque lo que plantea es un recurso antisocial y todo el tiempo que dedica a estas locuras es tiempo robado a los ciudadanos que están pendientes de algún dictamen, para muchos de ellos en asuntos de vital importancia”, explica un magistrado madrileño, que conoce los intríngulis de la justicia en la capital.

La amenaza de recurrir ante el Tribunal Constitucional el impuesto a las grandes fortunas que va a imponer el Gobierno, pese a que las encuestas muestran una mayoría de ciudadanos — también votantes del PP y Vox— que están de acuerdo con que los más ricos paguen más en momentos tan duros como estos, sirve para copar titulares aunque luego no llegue a ningún sitio. El CIS del pasado 6 de octubre desvela que incluso los votantes de PP y Vox piensan que el sistema fiscal español es mayoritariamente injusto por que los que más tienen no pagan más.

Apoyo a los que son más ricos que Felipe VI

También resulta útil para convencer al resto de madrileños de que es un favor colectivo a pesar de que salgan perdiendo al reducir los recursos para invertir en servicios esenciales que nos benefician a todos. El impuesto del Gobierno de Sánchez afectará a quienes tienen más de tres millones de patrimonio, algo que no tiene ni el Rey Felipe VI, que declaró 2,5 millones.

Claro que el sentido de quién es rico y pobre en el entorno de Isabel Díaz Ayuso y los suyos es perfectamente manipulable, de acuerdo con las medias verdades y las mentiras que saben difundir sin problema, copiando las técnicas populistas de Trump y Vox. O incluso poniéndolas en práctica, puesto que el asesor de Ayuso, Miguel Ángel Rodríguez, ya aprendió hace tiempo de Steve Bannon y Dominic Cummings, los genios de la manipulación en el siglo pasado.

Con esos parámetros, los populares —y la gente de Ayuso— no tienen reparos en acusar a Sánchez y su gobierno de embolsarse lo que ganan en impuestos —así, sin más la acusación— para llenarse los bolsillos, mientras la presidenta obvia que lo que cobra el presidente del Gobierno no es comparable con lo que cobra ella, Ayuso y sus consejeros, muy superior al sueldo de Sánchez. “Si ese es el criterio de Ayuso, lo que tiene que hacer es bajarse ella y a su equipo. A Miguel Ángel Rodríguez o a Enrique López, el magistrado que cobra los trienios de juez. ¿Les van a bajar el sueldo? Los datos están en el portal de transparencia”, señala un diputado de izquierdas de la Asamblea de Madrid.

Pero todo eso y mucho más da igual a quién está orgullosa de ser la presidenta de los ricos, triste y dolorosa gestora de las residencias de los ancianos de Madrid. Hace unas semanas aún se manifestaban en Madrid los familiares de los miles de muertos en esas residencias durante la pandemia, Hubo incluso un destello sorprendente por parte de Vox, cuando decidió apoyar la creación de la comisión de investigación sobre esa gestión y la prohibición de desviar a los ancianos con covid a los hospitales, pero al final los de Abascal y Rocío Monasterio han rectificado. A cambio de qué, mantiene la oposición, ya se verá más adelante.