La Policía surcoreana admite que la respuesta a los informes del 112 antes de la tragedia "fue insuficiente"

El Comisionado de la Agencia Nacional de Policía de Corea del Sur, Yon Hee Geun, ha reconocido que la respuesta del equipo que gestionó los informes aportados por el 112 antes de que se desarrollase la tragedia “fue insuficiente” y se ha comprometido a realizar una investigación “rápida e intensiva” del desastre.

En una rueda de prensa, Hee Geun ha reconocido este lunes los errores cometidos al gestionar el gran volumen de información que aportaron los dispositivos de emergencias 112 y se ha comprometido a revisar “minuciosamente” todos los documentos para comprobar si recibieron un informe que advirtiera del peligro por adelantado.

En este sentido, se ha comprometido a investigar la idoneidad de la respuesta general en el lugar de los hechos, incluida la gestión del 112 y si las acciones de los comandantes y trabajadores de cada nivel fueron apropiadas, según ha recogido la agencia de noticias surcoreana Yonhap. Además, ha anunciado un plan para establecer un organismo especial e independiente de la Agencia Nacional de Policía para desarrollar una investigación “transparente y rigurosa”.

También se ha comprometido, a título personal, a trabajar por “descubrir la verdad con la determinación que le exige ‘su carne’”. Horas antes, la Policía surcoreana ha admitido que se produjeron “errores” a la hora de tomar medidas que pudieran prevenir en mayor medida la tragedia en la que han fallecido más de 150 personas. Hong Ki Hyun, jefe de la Oficina de Gestión del Orden Público de la Policía Nacional, ha lamentado que no pudieran “anticipar la tragedia” ante las crecientes críticas por las acciones de las fuerzas de seguridad.

“Estaba previsto que se reunieran una gran cantidad de gente allí, pero no pensamos que habría víctimas debido a las aglomeraciones”, ha aseverado antes de indicar que “cada año se reúne un número similar de personas”. “La Policía que se encontraba en la zona no detectó un incremento repentino de la cantidad de personas en la zona”, ha aseverado, según informaciones de la agencia de noticias Yonhap.

Hong ha indicado que 137 efectivos de las fuerzas de seguridad fueron desplegados en la zona el domingo, en comparación con la cifra de años anteriores a la pandemia de coronavirus. No obstante, los agentes tenían previsto encargarse del tráfico y de delitos menores. En este sentido, ha aseverado que “no existe un manual” para abordar situaciones con grandes aglomeraciones como las de la festividad de Halloween en Itaewon, si bien ha garantizado que a partir de ahora se tomarán medidas al respecto para intervenir en caso de que se produzcan estas situaciones sin una clara organización.

Los funerales de las 154 víctimas han comenzado ya en Corea del Sur a medida que el Gobierno anuncia ayudas de 15 millones de wones (unos 9.100 euros) para los familiares de los fallecidos, que podrán así costear los servicios religiosos. Asimismo, las autoridades cubrirán los gastos médicos de todos aquellos que hayan resultado heridos durante la estampida.