La OTAN se pone en alerta después de que Rusia desplegara misiles hipersónicos en Kaliningrado
Y advierte que esas operaciones no ayudan a rebajar la tensión en la frontera.
La OTAN ha advertido este viernes a Rusia de que el despliegue de aviones de combate armados con misiles hipersónicos en el enclave de Kaliningrado no ayuda a rebajar las tensiones en las mismas fronteras de la OTAN, reiterando que defenderá “cada centímetro del territorio aliado”.
En declaraciones a Europa Press, un portavoz aliado ha señalado que Kaliningrado es una zona “altamente militarizada, como parte de la escalada militar rusa también ante las fronteras de la OTAN”.
En este sentido, la Alianza Atlántica ha recordado que se ha fortalecido su capacidad de disuasión y defensa en el flanco oriental y que vigila la situación en esta región.
Además, el portavoz ha expuesto que la OTAN “defenderá cada centímetro de territorio aliado”, en línea con la doctrina desarrollada los últimos meses en Ucrania donde la organización militar ha evitado intervenir directamente, dejando en manos de sus miembros enviar armamento a Kiev para repeler la ofensiva rusa, y centrándose en garantizar la seguridad de sus aliados.
El Ministerio de Defensa ruso informó a última hora del jueves del despliegue de tres aviones MiG-31 con misiles hipersónicos Kinzhal en el aeródromo de Chkalovsk, los cuales permanecerán, según el comunicado de Defensa recogido por la agencia de noticias rusa TASS en “servicio de combate las 24 horas del día” como parte de la implementación de medidas adicionales de disuasión estratégica.