La Ópera de París, envuelta en una polémica de acoso sexual
Critican la gestión de Dupont, que sustituyó a Benjamin Millepied, marido de Natalie Portman.
La Ópera de París, una de las instituciones más prestigiosas del mundo en su género, se ha visto en el foco de la polémica tras la filtración en los medios de un sondeo interno en el que sus bailarines denuncian casos de acoso y se quejan de su mala gestión.
En ese documento de 200 páginas, según destacó el diario Le Monde, el 25,9 % de sus bailarines dice haber sido víctima de acoso sexual o haberlo presenciado.
Otro 89,8 % de sus artistas creen que la gestión del centro es de "mala calidad", una crítica que apunta especialmente a la exbailarina estrella Aurélie Dupont, nombrada en febrero de 2016 directora artística del ballet.
Sin embargo, fuentes de la Ópera parisina aclararon que no ha habido "una denuncia oficial de esos casos" y aseveraron que "las puertas están abiertas" para presentar una eventual denuncia.
Asimismo, esas fuentes realzaron que Dupont "tiene un apoyo enorme de los bailarines", que así lo han refrendado en un comunicado público, y reprobaron que las denuncias hayan salido "sin ningún tipo de análisis y de forma anónima".
Los bailarines "tienen la sensación de haber sido manipulados" en la elaboración de este documento, agregaron las fuentes, quienes constataron el respaldo del director de la Ópera de París, Stéphane Lissner, a Dupont.
La investigación fue realizada por la comisión de expresión artística, organismo interno elegido por los bailarines, que interrogó a 154 de ellos bajo condición de anonimato.
Uno de los encuestados, según Le Monde, critica que Dupont no tenga capacidad de gestión ni "deseo de adquirirla", mientras que otros lamentan una "falta de diálogo" o un rechazo a escuchar las aspiraciones de profesionales que dicen sentirse "peones" a los que se reemplaza según convenga.
La llegada de Dupont estaba destinada a apaciguar los ánimos en la institución tras la salida del también francés Benjamin Millepied —marido de la actriz Natalie Portman y coreógrafo de Cisne Negro—, que dimitió tras poco más de un año por las diferencias mantenidas con la línea seguida tradicionalmente por ese ballet.
El director de la Ópera de París ha admitido en declaraciones recogidas por Le Monde que la dificultad de las relaciones humanas es intrínseca al mundo del baile, pero aseguró que tendrán en cuenta las conclusiones del estudio.
Recalcó también que ejerce además una "tolerancia cero" con los casos de acoso, por lo que animó a los afectados a contar lo sucedido a la dirección. Desde 2015, añadió, los tres casos denunciados terminaron en despido.