La ONU suspende a Rusia del Consejo de Derechos Humanos
Con 93 votos a favor, 24 en contra y 58 abstenciones.
La Asamblea General de la ONU ha suspendido la participación de Rusia en el Consejo de Derechos Humanos. La decisión llega en respuesta a los abusos y crímenes que está cometiendo en Ucrania, tras los últimos conocidos por la matanza de civiles en Bucha.
La votación, que se ha celebrado este jueves a iniciativa de EEUU y sus aliados, ha salido adelante con 93 votos a favor (entre ellos España), 24 en contra y 58 abstenciones.
No es una medida novedosa. Ya en 2011, el mismo pleno aprobó la expulsión de Libia por la brutal represión de las protestas populares contra el régimen de Gadafi. De hecho, una actuación así se contempla en los estatutos, donde se regula que un país puede ser expulsado de este órgano si comete abusos “graves y sistemáticos”.
Moscú advirtió recientemente de “consecuencias” en las relaciones con todos aquellos países que votasen a favor o se abstuviesen en la propuesta de EEUU, algo que para el Kremlin sería visto como un “gesto inamistoso”.
Por el momento, desde el Kremlin se ha dado a conocer que se retiran voluntariamente del Consejo. Según el diplomático Gennady Kuzmin, el órgano que tiene sede en Ginebra se ha convertido en un instrumento de EEUU y sus aliados, que fueron quienes impulsaron la suspensión de Moscú.
Kuzmin acusó a estos países de “minar la confianza” en el Consejo de Derechos Humanos y de usar la baza de los derechos humanos contra Rusia a pesar de que “han estado durante años involucrados en violaciones masivas” o las han facilitado.
Además, ha señalado que, pese a su retirada del órgano, su Gobierno “continuará cumpliendo con sus obligaciones” en materia de derechos humanos.
Qué supone la expulsión rusa
La medida es, principalmente, una nueva llamada de atención al mundo. Pero a nivel jurídico tiene poco efecto, porque el Consejo de Derechos Humanos no tiene carácter jurídicamente vinculante en sus decisiones.
En su seno, los países miembros formulan recomendaciones y pueden plantear investigaciones para la promoción y protección de los derechos humanos. En concreto, son 47.
Resultan elegidos por la Asamblea General en votación secreta y por mayoría simple para un plazo de tres años, renovándose un tercio anualmente. Rusia era, hasta ahora, uno de esos 47 y se encontraba en el segundo año del plazo de tres.
Otra vez contra Rusia, pero ahora con más división
No es la primera vez que Naciones Unidas vota mayoritariamente contra las acciones de Rusia en suelo ucraniano. El pasado 2 de marzo, la institución apoyó por amplísima mayoría condenar la invasión de Ucrania, con los únicos votos en contra de Rusia, Bielorrusia, Siria, Corea del Norte y Eritrea.
Además, el propio Consejo de Derechos Humanos aprobó a finales de marzo la creación de una comisión independiente para investigar los crímenes de guerra cometidos por las tropas rusas desde que comenzaron su ofensiva el 24 de febrero. Entonces, el rechazo únicamente lo demostraron Rusia y Eritrea.
Esta vez, la negativa ha ido más allá de esos cinco países, ya que también estados como China, Bolivia, Argelia, Irán, Kazajistán, o Nicaragua han rechazado el sentir mayoritario de Naciones Unidas este jueves.
El ministro de Exteriores de Ucrania, Dimitro Kuleba, ha celebrado la aprobación del texto, alegando que “los criminales de guerra no tienen cabida en órganos de la ONU destinados a proteger los Derechos Humanos”. En este sentido, ha agradecido a los países que han “elegido el lado correcto de la historia”.