La mujer asesinada en Alicante, víctima 1.044 de la violencia machista
Era madre de un menor y fue encontrada en un contenedor de basura tras ser degollada.
El Gobierno ha confirmado este martes que la mujer de 36 años asesinada en Moraira (Alicante) es víctima de la violencia machista, la número 11 de 2020 y la 1.044 desde que comenzaron a registrarse las estadísticas en 2003.
La Delegación del Gobierno contra la Violencia de Género ha informado de la naturaleza machista del crimen, un día después de que el cadáver de la mujer fuera encontrado en el interior de un contenedor de basura en Moraira.
La víctima, madre de un hijo menor, fue asesinada por su pareja el domingo 16 de febrero, según la Delegación, que ha precisado que pesaban denuncias previas por violencia machista contra el presunto agresor.
Un hombre ha sido detenido este martes en relación a este asesinato y los forenses examinan el cadáver de la víctima, que según los primeros indicios pudo morir degollada, para proceder a su identificación.
“Compromiso firme”
La ministra de Igualdad, Irene Montero, ha incidido en el “compromiso firme” del Gobierno para “poner todos los dispositivos y la fuerza de las instituciones públicas para que no haya ni una mujer más asesinada”.
“Porque nos queremos vivas, como dice el movimiento feminista y como también hace suyo este Gobierno”, ha subrayado en la rueda de prensa posterior a la celebración del Consejo de Ministros.
La delegada del Gobierno contra la Violencia de Género, Victoria Rosell, ha lamentado que el dolor de la violencia machista no cesa y ha pedido a la sociedad su implicación en esta lucha.
“El dolor de la violencia machista que no cesa. Desde la Delegación del Gobierno contra la Violencia de Género debemos prevenir y evitar. Y proteger, acompañar, dar salidas dignas a todas las víctimas vivas. Pero no es solo tarea judicial/policial/gubernamental. Es social: tuya, nuestra”, ha escrito Rosell en Twitter.
Desde 2003, 1.044 mujeres han sido asesinadas por sus parejas o exparejas.
Como consecuencia de estos crímenes, desde 2013 un total de 284 menores han quedado huérfanos -6 en 2020- y otros 35 han sido asesinados por sus padres o por las parejas o exparejas de sus madres.