La justicia europea condena a España por los niveles de contaminación de Madrid y Barcelona
Por el incumplimiento reiterado de ambas ciudades de los límites de seguridad frente al dióxido de nitrógeno. La Comisión Europea reactivó el caso después de que el PP suspendiese Madrid Central.
Nueva condena de la justicia europea a España por cuestión medioambiental. El Tribunal de Justicia de la Unión Europea (TJUE) ha condenado a nuestro país este jueves por el incumplimiento reiterado de la normativa comunitaria que fija los estándares de calidad del aire en sus dos mayores urbes: Madrid y Barcelona.
Cabe destacar que Bruselas fue la que reactivó el caso después de una medida tomada en la capital de España con el cambio de Ejecutivo municipal. Con la llegada a Cibeles del popular José Luis Martínez-Almeida y la retirada de Madrid Central, el plan impulsado por el Gobierno de Manuela Carmena, y su posterior sustitución por el programa Madrid 360.
Según ha publicado El País, el tribunal europeo ha tomada esta decisión argumentando que se incumplen desde 2010 los límites anuales de seguridad fijados por la UE para la exposición al dióxido de nitrógeno (NO₂). De momento, esta sentencia no va acompañada de una sanción económica como ha ocurrido en otros casos.
No obstante, la Comisión Europea tiene la potestad de volver a llevar a España ante la justicia y reclamar que se le imponga una multa. Y ese escenario puede convertirse en realidad, como ocurrió con la sanción impuesta por no depurar correctamente las aguas residuales en distintos puntos del territorio. Supuso una multa de 74,85 millones de euros.
El Gobierno podría trasladar las multas a los consistorios
En un hipotético caso de que la justicia europea acabase imponiendo una multa a España, a pesar de que se trata de una problemática determinada por la gestión municipal, el Gobierno podría trasladar parte de la cuantía de dicha sanción a los consistorios municipales. La pelota pasaría a estar así en manos de los Ejecutivos locales de Martínez-Almeida, pero también de la regidora Ada Colau -o en manos de sus sucesores tras los comicios de la próxima primavera-.
De hecho, tal y como recoge el mencionado medio, de esa millonaria multa por el estado de la depuración de aguas, el Gobierno ha trasladado parte a Ayuntamientos implicados.
La gran diferencia entre Madrid y Barcelona
Por otra parte, es necesario destacar que estos incumplimientos se corresponden al período de entre 2010 a 2018, en los que se ha superado el límite de exposición anual al NO₂, un máximo de 40 microgramos por metro cúbico. Sin embargo, la responsabilidad de los dos consistorios tiene matices importantes.
Según los informes anuales de calidad del aire del Ministerio para la Transición Ecológica, desde 2018 Madrid ha incumplido sistemáticamente los índices fijados como máximo. ¿Y en el caso del área metropolitana de Barcelona? En 2019 rebasó el límite, pero eso no ocurrió tanto en 2020 como en 2021.