La infanta Sofía derrocha personalidad en el desfile del 12 de octubre
La pequeña de la familia ha acompañado a los reyes ante la ausencia de Leonor.
Ante la ausencia de la princesa Leonor, que está estudiando bachillerato en Gales, la infanta Sofía ha acompañado en solitario a Felipe y Letizia para presidir el desfile del 12 de octubre.
La benjamina de la familia, que ya estuvo sola el año pasado, ha vuelto a hacer gala de su personalidad durante toda la mañana, charlando con sus padres, preguntando, con una sonrisa permanente y menos tímida que hace un año.
Nada más bajar del coche, Sofía ha dejado ver el vestido de Carolina Herrera que ha elegido para la ocasión y que demuestra la complicidad con su madre. Ambas han elegido el estampado de lunares para la Fiesta Nacional y la diseñadora venezolana es una de las favoritas de la reina.
A sus 15 años, la infanta va asentando su estilo y, como en la mayoría de actos a los que acude, ha apostado por un vestido corto y de color azul, uno de sus fetiches. Se trata de una prenda vaporosa, con lazada en la cintura y con una modificación respecto al diseño original, que es de largo midi.
Como era de esperar, la pequeña de la familia ha vuelto a calzar unas bailarinas de punta afilada azul marino, a juego con el vestido, y su larga melena rubia suelta. Esta vez, se podía apreciar un suave gloss en los labios.
Debido a la ausencia de la princesa de Asturias, Sofía ha ocupado el hueco a la derecha de su padre, con el que ha compartido conversación durante gran parte del desfile. Nada más llegar al palco después de saludar a los ministros y otras autoridades, la infanta no ha dejado de hacer preguntas a Felipe VI, demostrando una vez más su curiosidad.
Después, mientras el rey presidía el recorrido de los tres ejércitos, la infanta ha charlado con la reina Letizia, que ha estado muy pendiente de su hija pequeña. Tras el desfile, Sofía no ha participado en la recepción a las autoridades que presidirán los reyes en el Palacio Real.
Desde que eran pequeñas, las personas más cercanas a las hermanas han revelado las diferentes personalidades de cada una. Leonor, más tímida, mientras que Sofía es más espabilada y dicharachera, también porque tiene menos presión que la heredera. A pesar de sus diferencias, las hijas de Felipe y Letizia son uña y carne, como demuestran los numerosos gestos de cariño que se dedican en cada una de sus apariciones.
Leonor y Sofía sí asistirán juntas a los Premios Princesa de Asturias el 28 de octubre, otra de las fechas marcadas a fuego en el calendario de la familia real y que este año se ha retrasado para que coincida con las vacaciones de la princesa y pueda viajar desde Gales.