La frase de su abuela en plena defensa de su TFG que arrasa en Twitter
Manu Guerrero y su abuela Trinidad han logrado conquistar la red social.
Llega junio y con él los exámenes finales, las defensas de los trabajos de final de grado y las entregas de las últimas entregas de un curso académico marcado por el coronavirus. Con el confinamiento y el cierre de colegios, institutos o universidades, los alumnos y los profesores han estado obligados a hacer todo de forma virtual a través del ordenador.
En los últimos meses, se han hecho virales multitud de momentos incómodos y de anécdotas tan surrealistas como divertidas que han ido pasando durante las clases. Sin embargo, pocos han sucedido en exámenes y mucho menos en la presentación del TFG (Trabajo Fin de Grado).
Manu Guerrero, un joven presentó este lunes el TFG para terminar la carrera de Medicina en Cádiz, vio cómo su abuela Trinidad, de 76 años, entraba en su habitación durante las preguntas que le estaba haciendo el tribunal, en la parte final de la presentación.
“Estaba de espaldas a la puerta con los cascos puestos, sin escuchar nada, y veo que las caras del tribunal empiezan a cambiar. Una se empieza a reír. Pienso que algo debe de estar pasando, me quito los cascos y veo a mí abuela con un café en una mano y un plato con tostadas en la otra que me dice: ‘¿Niño tú no desayunas?’. Me quedé en shock, como si no pudiera estar pasando. Ya le dije que estaba liado y que saliera”, recuerda Guerrero un día después, cuando su tuit ya ha superado de manera inesperada los 45.000 me gusta.
Los profesores que le evaluaron, como describe el joven, no le dieron mayor importancia: “Me dijeron que no pasaba nada, se estaban riendo y se lo tomaron muy bien. Fueron muy comprensivos”. El resultado final, como él mismo colgó en su Twitter, así lo demuestra: sacó un 9. “Ninguna queja. Voy a pedirle más veces que entre”, bromea.
Guerrero cuenta que, como sabía que esto podía sucederle, había desayunado previamente con ella, ya que afirma que su abuela empieza a tener pérdidas de memoria. “Le recordé que iba a hacer la defensa del TFG y que no entrara, porque acostumbra a llevarme el desayuno mientras estudio. Se le pasó”, rememora entre risas.
Las mismas carcajadas que tuvo cuando hablaron una vez había terminado la exposición: “Nos reímos bastante y no fue nada negativo. Mi abuela es de las que no le falte comida a nadie”.
Un momento simpático de esos que siempre agradecen los usuarios de Twitter: “Han comentado de todo. Alguno ha llegado a decir que mi abuela es una reina”.