La era Biden vuelve a meter a Estados Unidos en el Acuerdo de París
El actual presidente se desmarca de las políticas de Trump y muestra su compromiso internacional en materia medioambiental.
La Administración de Joe Biden quiere marcar distancias con la era Trump. Este viernes, tras la salida del país por culpa del exmandatario, Estados Unidos volverá a formar parte del Acuerdo de París, mostrando su compromiso con las políticas medioambientales y remarcando su posicionamiento dentro de la comunidad internacional.
El instrumento que sentaba las bases para el retorno de EEUU al pacto global más ambicioso hasta la fecha en materia medioambiental fue firmado el mismo día que Biden llegó a la Casa Blanca. Su negociación se gestó cuando éste era vicepresidente durante el mandato de Barack Obama.
El enviado especial estadounidense para el clima, John Kerry, ha subrayado en sus redes sociales la importancia de “hacer esfuerzos globales en este ámbito”. “Ningún país puede librar esta lucha por sí solo”, ha advertido.
Por su parte, el secretario de Estado, Antony Blinken, ha defendido que el Acuerdo de París “es un marco sin precedentes para la acción global”, clave para “evitar un calentamiento planetario catastrófico” y paliar los impactos de un cambio climático que a día de hoy ya se observan.
“Atajar las amenazas reales del cambio climático y escuchar a nuestros científicos está en el centro de nuestras prioridades de política interior y exterior. Es vital en nuestras discusiones sobre seguridad nacional, migración, esfuerzos sanitarios internacionales, diplomacia económica y en conversaciones comerciales”, ha añadido.
El próximo 22 de abril habrá una cumbre de líderes mundiales para abordar este desafío, convocada por el presidente estadounidense, que servirá de preámbulo para la posterior Conferencia de Naciones Unidas sobre el Cambio Climático que será en Glasgow el próximo mes de noviembre.