Kike Sarasola, el empresario atípico que aloja a Díaz Ayuso
El fundador de Room Mate Hotels se ha visto involucrado en una polémica por la estancia de la presidenta de Madrid en un apartahotel de su cadena.
Activo, extrovertido, emprendedor, solidario y atípico. Así es Enrique Sarasola (Madrid, 1963), al que se conoce popularmente como Kike, un famoso empresario madrileño, presidente y fundador de la cadena hotelera Room Mate.
Su empresa ofreció desde un primer momento sus instalaciones a la Comunidad de Madrid para alojar a personal sanitario, pacientes o ancianos durante la pandemia del coronavirus, un gesto que fue muy aplaudido por la ciudadanía. Lo hizo también en otras partes del mundo, hasta contar con 13 hoteles dedicados a este propósito, de los 25 que gestiona la cadena.
Sin embargo, esta semana se ha visto envuelto en una polémica al descubrirse que la presidenta regional, Isabel Díaz Ayuso, se encontraba alojada en uno de los apartahoteles de lujo de esta cadena desde el pasado 16 de marzo, supuestamente tras dar positivo por covid-19. Tras la publicación de la noticia por Vanity Fair, se iniciaron una serie de versiones contradictorias sobre el tiempo de la estancia, el pago del alojamiento y la aparición de un misterioso contrato por medio millón de euros.
Actualmente, Sarasola se encuentra confinado en Colombia, junto a su pareja y sus dos hijos. A pesar de la distancia, el empresario -muy activo- no ha dejado de gestionar su cadena hotelera, participar en eventos virtuales, conferencias e incluso entrevistas televisivas en los informativos de Pedro Piqueras o en el programa matutino Espejo Público.
Hijo de un empresario vinculado al PSOE
Antes de ser empresario, Sarasola se dedicó durante su infancia y adolescencia a su pasión: la hípica. Se convirtió en un conocido jinete español, muy laureado: cuatro veces campeón de España y participación en los Juegos Olímpicos de Barcelona, Atlanta y Sidney,
Kike Sarasola es hijo del empresario Enrique Sarasola Lerchundi y de María Cecilia Marulanda, de origen colombiano. Sus padres fueron amigos íntimos del expresidente del Gobierno Felipe González. “Dicen que la amistad no tiene precio, pero para Enrique la que mantuvo conmigo, durante tantos años, tuvo un altísimo coste en sufrimiento humano, en persecución insidiosa”, escribió el expresidente en El País cuando murió Sarasola padre en 2002.
Su amistad llegaba hasta tal punto, que el empresario alojó en su casa a la familia de Gónzalez durante el golpe del Estado del 23-F. “Acudía el primero en situaciones de riesgo, como en los momentos del golpe de 1981, ofreciendo su casa para los míos”, recordó.
Siempre ha existido una sospecha sobre el origen de la fortuna del padre de Kike Sarasola, que amasó en Colombia. La Fiscalía Provincial de Madrid solicitó cuatro años de prisión para el empresario, su hermano Fernando y la madre de ambos por un delito contra la Hacienda Pública, relacionado con la herencia.
Socio de Rosalía Mera y Sandra Ortega
A pesar de su pasíón por la hípica, Kike Sarasola imitó a su fallecido padre al convertirse en empresario. “Mi padre era mi ídolo. Yo de pequeño quería ser hombre de negocios y jugaba a que me iba a trabajar con un maletín”, confesó en 2009.
Tres años antes, Sarasola había lanzado su cadena hotelera urbana, llamada Room Mate Hotels, junto a su marido y otros dos amigos de toda la vida, Eduardo Sanzol y Gorka Atorrasagasti. El dinero restante de la inversión lo aportó Rosalía Mera, la primera esposa de Amancio Ortega, dueño de Inditex, considerada la mujer más rica de España.
Tras el fallecimiento de esta, su hija Sandra Ortega posee el 30% de las acciones de la cadena hotelera, a través de la sociedad Rosp Corunna, y el 70% restante está en manos de Sarasola.
Uno de los gays más influyentes
Uno de los rasgos que caracteriza a Sarasola es que nunca ha ocultado su vida privada, a diferencia de la mayoría del empresariado español. Su instagram está plagado de fotos con su familia y suele hablar de su vida privada y de su trabajo en los medios de comunicación con mucha frecuencia.
Una de sus apariciones más notorias se produjo en 2003, cuando Sarasola salió del armario, convirtiéndose en el primer deportista español de élite en hacer pública su homosexualidad. Algo que ya sabía su familia desde que tenía 19 años.
Apareció junto a su pareja, Carlos Marrero, en aquel momento productor audiovisual, en la portada del número 48 de la revista Zero. Este magazine de temática LGTB ya desparecido, fue muy popular porque muchos famosos dieron a conocer su orientación sexual en sus páginas, como el presentador Jesús Vázquez o el político Miquel Iceta.
Tras 14 años de noviazgo y la legalización del matrimonio igualitario, Sarasola se casó con Carlos Marrero, su novio de toda la vida, en octubre de 2006. El enlace se celebró en la Casa de la Panadería, en la plaza Mayor de Madrid, y fue oficiado por la entonces concejala socialista Trinidad Jiménez, que luego sería ministra de Sanidad. El banquete tuvo lugar en el Museo del Traje.
Como no podía ser de otra forma, la boda contó numerosas famosos y personalidades, como el expresidente Felipe González, el exministro José Bono, Eugenia Martínez de Irujo, la actriz Cayetana Guillén Cuervo y la cantante Amaia Montero. “Sarasola se casó a lo grande”, tituló el periódico ABC. El gran ausente de la ceremonia fue su hermano Fernando.
El periódico El Mundo incluye desde hace años a Sarasola en su listado como los gays más influyentes de España, en la que no suelen faltar personalidades como el director de cine Alejandro Amenábar o el ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska.
Un ‘rojo’ vinculado a Ciudadanos
A pesar de qué el se ha definido públicamente como “rojo” y ha mostrado su apoyo a diversas causas sociales como la oenegé Open Arms, Sarasola se convirtió en un apoyo fundamental de Albert Rivera, expresidente de Ciudadanos, cuando aterrizó en Madrid.
Sarasola no solo publicaba numerosas fotos junto a Rivera, sino que se involucró en la plataforma España Ciudadana y llegó a participar en mítines del partido liberal, algo nada habitual en el mundo empresarial.
Al igual que Ciudadanos, Sarasola defendió la aprobación de una ley para regular la gestación subrogada o vientres de alquiler. De hecho, el empresario hotelero recurrió a este método junto a su marido para el nacimiento de sus dos hijos, Aitana y Enrique.
Las fotos de los cuatro miembros de la familia, con los niños de espaldas, son habituales en su cuenta de Instagram, en diversos viajes y eventos.
Un empresario siempre dispuesto
Sarasola es muy conocido en Madrid, en donde se prodiga por numerosos eventos dedicados al emprendimiento y al turismo. Desde hace años mantiene una amistad con María Benjumea, la fundadora de Spain Startup, la empresa que gestiona el evento de emprendedores South Summit, al que siempre está invitado.
Mucho antes de que Ana Botín, la presidenta de Santander, participara en el programa Planeta Calleja, Sarasola ya era un habitual de los medios. Este empresario hotelero presentó el programa Este hotel es un infierno, emitido por DMax en 2017, en el que aconsejaba a hoteleros sobre cómo reorientar su negocio, al igual que hace Chicote con los restaurantes en Pesadilla en la cocina (La Sexta). A diferencia del chef, el programa de Sarasola solo duró una temporada, al registrar una audiencia del 1,5%.