Aragonès excluye a JxCat de la mesa de diálogo al proponer a dos indultados y abrir una crisis en el Govern
El president veta a Sànchez, Turull y Nogueras por no formar parte del Ejecutivo catalán y sus socios de coalición se cierran en banda.
Nuevo choque en el seno del Govern, esta vez solo un día antes de que se produzca la primera reunión destinada a reactivar los contactos entre el Gobierno y la Generalitat. Junts per Catalunya (JxCat) ha renunciado a estar en la Mesa de Diálogo por un veto a los hombres que iba a sentar en ella que atribuye a Moncloa.
El lío sobre la presencia de Junts ha empezado porque la formación del vicepresidente catalán Jordi Puigneró ha incluido entre los miembros propuestos para formar parte de la delegación de la Generalitat a Jordi Sànchez y Jordi Turull. Se trata de dos de los condenados por la sentencia del procés que fueron indultados por el Gobierno de España. Este movimiento ha provocado que Junts sea excluida de la mesa de negociación hasta que se produzca una rectificación.
La formación socia de la coalición en el Govern ha anunciado una propuesta con cuatro nombres a través de un comunicado, que ha levantado resquemores en la otra parte del Ejecutivo al no ser consensuado previamente. Además del secretario general y del vicepresidente del partido, JxCat quiere incluir al vicepresidente del Govern, Jordi Puigneró, y a la portavoz en el Congreso, Míriam Nogueras. Esta última tampoco ha sido aceptada por ERC.
Aragonès ha comparecido ante los medios para abordar la fractura producida en la coalición, en una intervención en la que solo ha avanzado los integrantes de Esquerra en la delegación. “Quiero dejar muy claro que no es una cuestión de nombres ni de personas concretas, es una cuestión de confianza en los acuerdos que son claros, iniciales en la negociación con el Estado [español]”, ha valorado.
“La delegación ha de ser como ha sido siempre, de Gobierno, porque es la forma de representar al país entero”, ha remarcado, al tiempo que ha dejado la puerta abierta a Junts, pero sólo si presenta a representantes que formen parte del Govern. De esta manera, Aragonès ha dejado entrever que se ha producido un problema de “lealtad” a su figura como president con esta suerte de pulso político.
Apoyo a Aragonès en La Moncloa
Desde La Moncloa han mostrado el más absoluto respeto por la decisión tomada por Pere Aragonès. Así lo ha manifestado la portavoz del Gobierno de España, Isabel Rodríguez, quien ha confirmado que la presencia de Pedro Sánchez se mantiene. Además, la portavoz ha remarcado que acudirán a las negociaciones con “voluntad de diálogo” y en busca de “entendimiento”.
“Nunca se ha entendido otro marco que el que no fuera equipos de los distintos gobiernos”, ha concretado Rodríguez sobre la composición de ambas delegaciones. A este respecto, también ha reconocido que si la Generalitat hubiera seguido adelante con la propuesta de Junts, el Gobierno no se habría sentado a la mesa. “Absolutamente no”, ha respondido.
Precisamente, la propuesta de Junts ya había tenido respuesta esta mañana por parte del ala de ERC en el Govern, quien había establecido que solo se podría enviar a las negociaciones a integrantes del Ejecutivo catalán. El presidente de la Generalitat, Pere Aragonès, había vetado los nombres propuestos por JxCat que son ajenos al Gobierno autonómico en el marco de la reunión del Consell Executiu que ha sido interrumpida. Según ha podido saber EFE, la respuesta de los socios ha sido la de cerrarse en banda.
Choque abierto entre ERC y JxCat
A lo largo de la mañana ha tenido lugar una reunión entre los integrantes de Ejecutivo catalán, en la que se decidirá la lista de integrantes final que compondrá la delegación en la mesa de diálogo. No obstante, la inclusión de Jordi Sànchez y Jordi Turull supone un choque frontal con la previsión de la portavoz del Govern, Patrícia Plaja, que había asegurado que la delegación de la Generalitat estaría formada por miembros del Govern.
Si se pone el foco en los nombres que Esquerra Republicana de Catalunya (ERC) ha designado todos ellos comparte una característica común: los tres políticos tienen un peso fundamental en el Ejecutivo catalán. Se trata del propio president de la Generalitat, así como el presidente del Parlament, Roger Torrent y la conseller de Presidencia, Laura Vilagrà.
Fuentes de la Presidencia a las que ha tenido acceso la Agencia EFE han expresado su “malestar” por el hecho de que JxCat haya hecho público oficialmente a través de un comunicado su lista de nombres “antes de consensuarlos”. Según las mismas fuentes, “se había dicho y acordado que sería una negociación de gobierno a gobierno, con representantes del Govern”. De hecho, hace unos meses ya había prendido la polémica ante la posibilidad de que el ex vicepresidente de la Generalitat Oriol Junqueras formase parte de la mesa.
El diputado de Esquerra en el Congreso Gabriel Rufián ha abordado el conflicto abierto con JxCat y ha dejado entrever la importancia de que sea dos ejecutivos los que se sienten a ambos lados de la mesa. En este sentido, ha celebrado que “por primera vez un presidente del Gobierno se sentará en una mesa sobre el conflicto político entre España y Catalunya”.
A este respecto, y en referencia al choque en el Govern, Rufián ha llamado a centrarse en los objetivos del independentismo. “Conviene aislar la mesa de diálogo y negociación de todo lo demás”, ha destacado en rueda de prensa desde el Congreso.
Críticas del PDeCAT y la CUP
La brecha abierta entre JxCat y ERC no ha sido pasada por alto por los otros partidos nacionalistas catalanes. Desde la CUP han mostrado su “escepticismo”, en palabras de su portavoz en el Congreso, Mireia Vehí. Los cupaires incluso han anunciado una protesta mientras tenga lugar la mesa de diálogo, que considera “un paripé”.
El PDeCAT ha cargado con contundencia a la hora de valorar el choque abierto entre JxCat y Esquerra. Su representante en la Cámara Baja, Ferrán Bel, ha dado un sonoro toque de atención calificando de “espectáculo lamentable” el baile de nombres. A su parecer, “en Moncloa deben estar partiéndose de risa”.
Bel ha recordado que la pasada semana ya habían alertado de la conveniencia de no dejar para el último momento la confección de la lista de integrantes del Govern en la mesa. No obstante, se ha posicionado en la línea de ERC, defendiendo que sólo acudan integrantes del Govern a la negociación.
Sánchez y Aragonès se verán al principio de la reunión
El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, y el de la Generalitat, Pere Aragonés, inaugurarán este miércoles la nueva etapa de la mesa de diálogo entre sus dos Ejecutivos. No obstante, la previsión en que la de que solo se quedarán al principio del encuentro, fijada en Barcelona a primera hora de la tarde. Tras esa cita, se marcharán y serán sus respectivos equipos los que prosigan con las negociaciones.
Con todo, tanto Sánchez como Aragonès tendrán un papel de especial relevancia en las negociaciones, puesto que serán los encargados de marcar los objetivos y abordar la planificación y desarrollo de la mesa de diálogo en una reunión previa que mantendrán solos. En este sentido, todos los ojos están puestos sobre la gran línea roja fijada por el Gobierno, la celebración de un referéndum de autodeterminación vinculante.