Juan Carlos I no se queja de su situación y piensa en su entierro, según su última biografía
Y sigue desde Abu Dabi la actualidad española.
Salen a la luz nuevas confesiones del rey emérito en su última biografía publicada este miércoles en Francia y en la que, entre otras asuntos, ha revelado que pasa su tiempo en Abu Dabi repasando la actualidad española, sin quejarse de su situación, con un aspecto mejorado aunque dice pensar en su entierro. Hace unos días se habían filtrado otros extractos como su relación con su hijo, Felipe VI.
En las 268 páginas del libro “Mi rey destronado”, escrito por Laurence Debray, comenzó a gestarse en 2014 pero dio un giro radical en 2020, con la salida de Juan Carlos I de España ante los crecientes escándalos por sus manejos financieros.
Tras haber tenido algunos contactos con el emérito desde 2014, Debray asegura haber mantenido conversaciones telefónicas en el otoño de 2020 y haber intercambiado algunos mensajes por WhatsApp durante el confinamiento, antes de haberle hecho una visita a Abu Dabi la pasada primavera.
El libro no es obra de alguien neutral, ya que la propia Debray reconoce reiteradamente su admiración por el monarca emérito, y juzga clave su actuación en la transición democrática o en el fracaso del intento de golpe de Estado militar de 1981.
Así, en ningún momento aparece que le pregunte a fondo por los motivos que lo llevaron a dejar el país. En cambio, la autora, aunque recuerda “sus cuentas en Suiza”, afirma que el rey emérito “no ha cometido un delito penal, un homicidio, un robo, una violación”.
En este sentido, la autora narra que el rey emérito “aceptó un regalo difícil de rechazar de parte del rey de Arabia Saudí” (la donación de 65 millones de euros), igual que viajes en avión o una tarjeta de crédito de familiares o amigos generosos.