John Bradley (Samwell Tarly) habla de la esperada escena con Jon Nieve en 'Juego de Tronos' (HBO)
“Creo que los seguidores sentirán en esa escena que la persona correcta ha hecho lo correcto”.
SPOILERS: si no quieres saber nada de lo que pasa en el primer episodio de la octava temporada de Juego de Tronos, no sigas leyendo.
En el estreno de la octava temporada de Juego de Tronos, Samwell Tarly (John Bradley) por fin le revela a Jon Nieve (Kit Harington) la madre de todos los secretos: que sus padres son Lyanna Stark (Aisling Franciosi) y Rhaegar Targaryen (Wilf Scolding), que su verdadero nombre es Aegon Targaryen y que es el legítimo heredero del Trono de Hierro.
Y el Rey en el Norte se ha quedado así:
Se veía venir. Tras años de teorías (décadas, en realidad) la sexta temporada de la serie confirmó las sospechas de la teoría de que R + L = J (el equivalente en jerga de fans de Rhaegar + Lyanna = Jon) con una escena clave en la Torre de la Alegría. Se sabía que Rhaegar se había casado con Elia Martell, de modo que Jon todavía podía ser un bastardo. No obstante, en la temporada 7, Gilly (Hannah Murray) descubre que Rhaegar logró anular el matrimonio. Poco después se sabe que Lyanna y él se casaron de forma legítima. Jon Nieve, ahora Aegon Targaryen, es el heredero legítimo del Trono de Hierro.
Sam y Bran, también conocido como el Cuervo de tres ojos o el Google de Poniente, descubrieron toda la verdad en los momentos finales de la séptima temporada, de modo que era cuestión de tiempo que Jon también se enterara.
Tras la emisión de la séptima temporada, Isaac Hempstead Wright (Bran Stark) atendió por teléfono a la edición estadounidense del HuffPost y dijo que esperaba que fuera Sam quien le diera la noticia a Jon.
“Sería un reencuentro un poco abrumador para Jon si se juntaran en plan: ‘Hola, Bran. ¿Qué tal te va?’ ‘Genial. Por cierto, lo sé todo y eres el heredero del Trono de Hierro’. No creo que sea la mejor forma de decírselo”, comentó.
En el episodio de la madrugada del domingo, el deseo de Isaac Hempstead Wright se hizo realidad.
Hacia el final del capítulo, Bran le dice a Sam que debe ser él quien le cuente a Jon su verdadero parentesco diciéndole básicamente: “Los seguidores ya llevan mucho tiempo esperando, ¡hazlo de una vez!”.
Sam se reúne con Jon en las criptas de Invernalia y, tras un encuentro incómodo (porque ha estado evitando a Jon desde que está en Invernalia para no tener que darle la noticia), le suelta la bomba: a Daenerys Targaryen (Emilia Clarke) no le corresponde ser reina. El verdadero nombre de Jon es Aegon Targaryen, el Sexto de su nombre, Protector del Reino... y todo eso:
Nunca has sido un bastardo. Eres Aegon Targaryen, heredero del Trono de Hierro.
Es un momento trascendental. Sam se acaba de enterar de boca de la propia Daenerys de que incineró a su padre y a su hermano por no arrodillarse ante ella, de modo que la idea de servir a la Madre de Dragones no le sienta demasiado bien. Este le dice a Jon que debería ser el rey y le pregunta si él también habría ejecutado a los Tarly.
Jon dice que ya ha ejecutado a hombres desobedientes, pero se deja entrever que no, no habría ordenado que un dragón redujera a la familia de Sam a cenizas. Es comprensible, la verdad.
John Bradley, quien encarna a Sam, ha valorado así la escena en declaraciones a la edición estadounidense del HuffPost:
“Nunca es fácil decirle a alguien lo que Sam le cuenta a Jon, pero creo que si dependiera de Jon y tuviera que oír una noticia así, preferiría que fuera Sam quien se la contara. Creo que Sam le quiere y de verdad se lo dice con las mejores intenciones. No le contaría a Jon una noticia así solo para iniciar un conflicto. Lo haría porque siente que lo tiene que saber. Creo que si Jon lo tenía que oír de alguien, elegiría a una persona en la que confía y a la que quiere”.
En la escena, Jon insiste en que Ned Stark (Sean Bean) jamás le habría ocultado una verdad así. Y seguramente sea cierto. Al fin y al cabo, Ned Stark le prometió a Jon que le revelaría toda la verdad sobre su madre cuando volviera de Desembarco del Rey, pero no tuvo la oportunidad.
Al final, sin que Sam aporte pruebas (tranquilo, Sam, todos saben que dices la verdad), Jon parece aceptar su nuevo linaje.
John Bradley añade: “Creo que los seguidores sentirán en esa escena que la persona correcta ha hecho lo correcto”.
El compositor de la banda sonora de la serie, Ramin Djawadi, también hace especial énfasis en la escena, por lo que acaba siendo el momento más destacado del estreno.
Las implicaciones de esta revelación suponen un importante cambio. Como dice Sam, ahora Jon es el legítimo heredero del Trono de Hierro, algo que le deja en shock, ya sea por la responsabilidad que supone o porque ha descubierto que se ha estado acostando con su tía.
No es una imagen muy agradable.
Claro que Juego de Tronos ha exhibido un incesto entre los mellizos Lannister Jaime (Nikolaj Coster-Waldau) y Cersei (Lena Headey) durante años, y los Targaryen arrastran un amplio historial de matrimonios entre familiares. Sin ir más lejos, los padres de Daenerys eran hermanos y de no haber sido por Khal Drogo (Jason Momoa) probablemente habría acabado con su hermano Viserys (Harry Lloyd).
George R.R. Martin, autor de la saga de novelas de la saga Canción de Hielo y Fuego, en las que se basa la serie de HBO, dijo desde el primer libro: “Siempre tuvo asumido que se casaría con Viserys cuando tuviera la edad suficiente”.
(Supongo que en vez de casarse con su hermano se tendrá que conformar con su sobrino).
Aun así, sigue sonando raro.
¿Y ahora qué? ¿Se lo contará Jon a Daenerys inmediatamente? ¿Seguirá “abrigando a su reina”? ¿Se habrá dado cuenta de que ha montado a Rhaegal, el dragón llamado así en honor de su padre? Pase lo que pase, tranquilidad: Jon sabe algo. Mejor dicho: sabe demasiado.
Este artículo fue publicado originalmente en el ‘HuffPost’ Estados Unidos y ha sido traducido del inglés por Daniel Templeman Sauco.