Ellos prefieren sexo por la mañana y ellas, por la noche: ¿cómo solucionarlo?
Tres claves para superar ese problema de horario y libido.
Muchos hombres se levantan llenos de energía, y en más de un sentido. Por lo que se sabe, las mañanas son la hora del día en la que la libido de los hombres está en su pico máximo.
Los hombres a menudo quieren sexo nada más despertar, sobre todo si amanecen con una erección. Mientras tanto, entre las mujeres la hora de mayor deseo sexual se da justo antes de irse a la cama.
Estas horas de diferencia entre la hora preferida de ellos y la de ellas no es un problema cuando la pareja es homosexual, pero entre parejas heterosexuales es un motivo frecuente de tensiones. Según una encuesta de Ilicitencounters, el 64% de las mujeres y el 38% de los hombres aseguran que a veces practican sexo con sus parejas en momentos en los que no tienen ganas.
La encuesta, realizada a más de 2000 personas (1000 hombres y 1000 mujeres), descubrió que más de la mitad de las mujeres (53%) y una cantidad similar de los hombres (51%) señalaban que su nivel de deseo sexual era diferente al de su pareja.
Dos tercios de los hombres (64%) decían que querían más sexo que sus parejas, mientras que solo el 32% de las mujeres decían tener un mayor deseo sexual.
Además, esta diferencia había causado problemas en el 38% de las relaciones de esos hombres y en el 34% de las relaciones de las mujeres.
Jessica Leoni, experta en sexo y relaciones, asegura que no es imposible superar ese problema de horario y libido.
“Tu novio se despierta excitado y siempre está dispuesto a primera hora, mientras que a ti no te gustan las mañanas y no quieres llegar tarde al trabajo. Es un escenario muy común, pero no es definitivo y, como sucede con casi todos los problemas sexuales, se puede solucionar con comunicación y un poco de compromiso”, asegura Leoni.
Intentad iros a la cama antes para tener más tiempo por las mañanas o acostaos más tarde alguna noche, recomienda Leoni.
“Habla con tu pareja y planificad el sexo cuando tengáis ganas. A muchas parejas les horroriza la idea de planificar el sexo, pero en realidad es una forma de priorizar la relación y asegurar que sacáis tiempo para disfrutarla a tope”, comenta Leoni.
“Ambos hacéis un esfuerzo y planificáis el sexo (quizás preparando la cena antes o pidiendo comida). ¿Qué tiene eso de malo?”.
“El compromiso es siempre importante, así que ¿por qué no turnaros la hora del sexo? Elegid una frecuencia también: una vez al día, a la semana...”, sugiere Leoni.
“Si vuestros horarios de trabajo son completamente distintos y eso está afectando a vuestra vida sexual, habladlo entre vosotros para buscar una solución. Hablad con sinceridad y aseguraos de que hacéis varios huecos en vuestra agenda por si en algún momento os apetece a ambos”.
Leoni también recomienda analizar las razones por las que no coincide vuestra libido en determinados momentos. ¿Es una cuestión de horarios o utilizáis los horarios como excusa para no intimar?
“Encontrar tiempo de calidad para intimar requiere esfuerzo”, advierte. “No consiste solo en planificar el sexo, sino también en intimar fuera del dormitorio. Durante el día podéis daros besos, abrazos, caricias y miradas sin intención de que acaben en sexo. Si sois una pareja tocona, el sexo llegará por sí solo tarde o temprano y los horarios no serán un obstáculo”.
Este artículo fue publicado originalmente en el ‘HuffPost’ Reino Unido y ha sido traducido del inglés por Daniel Templeman Sauco.